En Puerto Rico, no existen regulaciones para el uso de cupones de descuento, hecho que perjudica el acceso del consumidor a un sinnúmero de productos, opinó Diana Benítez, de Qponeo.
La portavoz de Qponeo indicó que brindan servicios de orientación a consumidores, vendedores y manufactureros sobre el uso de este mecanismo en la isla. Esta dijo que, en Estados Unidos, hay leyes que regulan tanto la producción de los cupones como las redenciones. Además, hay organizaciones sin fines de lucro que se dedican a monitorear y a evitar el fraude de cupones, herramientas de vigilancia que no existen localmente.
PUBLICIDAD
“En Puerto Rico, no hay legislación alguna que toque el tema de los cupones, y el DACO no cuenta con una ley, con una ordenanza ni tampoco con un manual, como el que vemos a veces en el Black Friday, de uso apropiado de cupones. ¿Dónde es que entonces se da la situación? A que queda la puerta abierta de que el establecimiento pueda redactar su propia política de cupones sin una ley o reglamento que los regule. Entonces, eso es perjudicial para el consumidor en el sentido de que cada tienda puede redactar las reglas del juego”, precisó.
Además de la falta de legislación, Benítez expuso que la falta de información ha llevado a algunas tiendas a ocultar los productos cuando estos tienen cupones de manufacturero, a pesar de que ese dinero se le devuelve al comercio.
La experta en ahorros comentó que actualmente el Departamento de Asuntos del Consumidor (DACO) vigila que los comerciantes no violen sus propias políticas de redención de cupones de descuento.
Tendencia creciente
A pesar de las trabas en cuanto a la redención, el uso de cupones ha ido en crecimiento en los pasados años. Según Benítez, “vemos que el consumidor ha perdido el miedo a usar los cupones. Ya no le da vergüenza”, a la vez que comercios como supermercados locales y farmacias han comenzado a aceptarlos.
Finalmente, la portavoz de la compañía Qponeo opinó que “los cupones son una de las pocas cosas en la vida que son un win win para todas las partes”. Según indicó, estos representan para el consumidor un vehículo para comprar con un descuento un artículo que necesita, mientras que el comercio logra una venta a través de un especial. Asimismo, el manufacturero, que es quien emite ese cupón, logra también una venta o que el consumidor pruebe por primera vez su producto.
