1.
Brasil hizo que los rusos se enamoraran
Tomer Savoia se convirtió en el fanático brasileño más famoso gracias al video en el que maldijo en ruso lo bello que es el país anfitrión. Durante la Copa del Mundo, el número de seguidores del capitán de los aficionados brasileños, como se llama a sí mismo @tomersavoia, creció de 3k a más de 30k.
PUBLICIDAD
2.
Japoneses y senegaleses se enfrentaron a la basura
Los aficionados de la selección nacional de Japón han sorprendido al mundo limpiando los estadios después de los partidos. También los senegaleses. Su ejemplo también inspiró admiradores de otros equipos. Por ejemplo, Leonel Sahori Gamez Rueda, de México, llamó a sus compatriotas a seguir el ejemplo: “Debo decir que no todo el mundo apoyó esta idea, pero en cuanto la gente vio cómo otros limpiaban la basura, se unieron”, dijo a Metro.
PUBLICIDAD
3.
Los islandeses se tomaron el Parque Zaryadye
“Los “vikingos” volvieron a conquistar a todos con su famoso “¡Hú!”, que fue repetido por admiradores de muchos otros países. Particularmente eficaz fue la aparición de los islandeses en Zariadye, parque paisajístico urbano situado junto a la Plaza Roja en Moscú. Allí no sólo hicieron su grito de guerra, sino que también cantaron canciones nacionales.
4.
Las canciones inglesas
No muchos aficionados ingleses vinieron al Mundial. Pero los que pudieron eran muy ruidosos. Además del himno nacional, muchos cantaban “It’s coming home, football’s coming home”, y otro canto confirmando que los amantes del fútbol de este país están dispuestos a beber todo el vodka de Rusia. Muy popular se convirtió la canción sobre el entrenador Gareth Southgate y “Por favor, no me lleves a casa”.
5.
Mexicanos con un amigo de cartón
Durante el Mundial, todo el mundo conoció la historia de un mexicano llamado Javier, cuya novia no le dejó ir a Rusia. Sus amigos trajeron su copia de cartón a tamaño real que llevaron a todas partes durante el torneo. Afortunadamente, la historia tuvo un final feliz, porque el verdadero Javier tuvo la oportunidad de venir y disfrutar de la celebración del fútbol.
6.
Los suecos se bebieron toda la cerveza
Los aficionados de la selección sueca hicieron una famosa canción, que habla del deseo de no abandonar el torneo de fútbol, sino de quedarse a beber toda la cerveza. Como escribió Sportbladet, los escandinavos celebraron una gran fiesta antes del partido entre Suecia y Corea del Sur en Nizhny Novgorod, donde las existencias de la bebida en muchos bares terminaron en la víspera del partido.
7.
Francés con un gallo
Clement d’Antibes lleva muchos años llevando un gallo vivo a los estadios como amuleto. A lo largo de su carrera de aficionado, visitó 246 partidos de la selección francesa y se convirtió en una celebridad en su país. En Rusia no se le permitió llevar el gallo a las arenas, por lo que tuvo que dejar el pájaro en un zoológico de Nizhni Nóvgorod.
8.
Los iraníes molestando a Ronaldo
Antes del partido contra la selección portuguesa, los aficionados iraníes celebraron una gran fiesta fuera del hotel donde se alojaba la selección portuguesa. Esto perturbó a Cristiano Ronaldo, la estrella principal de sus rivales. El goleador incluso se dirigió al balcón y pidió con carteles que la gente se quedara más tranquila, ya que no podía dormirse.