El director clínico de audiología y director de Precision Hearing and Balance Center, Eugenio Gómez, advirtió hoy de los peligros de la pérdida de audición relacionados con los trabajos.
“Vivimos en un mundo sumamente activo, cada aspecto de la rutina diaria y del planeta está identificado por ruidos o sonidos. Sin embargo, cuando exponemos el oído a ruidos fuertes este sufre daños de forma paulatina. A veces, nos enfocamos y pensamos que la vejez, las condiciones de nacimiento o enfermedades neurológicas son determinantes al momento de sufrir la pérdida de audición”, señaló Gómez.
Añadió que “cuando uno se expone a altos niveles de ruido, por ejemplo sobre los 85 decibeles en adelante es bien probable que causen daños irreparables al oído. Existen profesiones o lugares de trabajo que exponen este órgano a condiciones extremas, causando que se afecte y que las personas se vean seriamente afectadas. Es importante identificar los cambios en el sistema auditivo para determinar si es su profesión la que está causando este cambio”.
Algunas de las profesiones que pueden afectar seriamente la audición se encuentran en los aeropuertos, específicamente aquellas en las que se debe laborar cerca de la pista de los aviones (donde hay sonidos que puede alcanzar alrededor de los 140 decibeles).
También se arriesgan los pilotos de carros de carrera (el sonido de estos vehículos alcanza los 135 decibeles), personas que trabajan en la construcción (donde máquinas emiten sonidos de 130 decibeles) y los DJ (ritmos de musicales puede llegar a sobrepasar los 115 decibeles), entre otras.
“Una de las enfermedades que puede causar la exposición a altos niveles de ruido lo es el tinnitus. La misma es un zumbido continuo o silbido en los oídos y la cabeza. Aunque esta condición puede desaparecer con el pasar del tiempo, en ocasiones puede durar toda la vida. Es importante que los profesionales expuestos a estos tipos de trabajo se protejan, utilicen audífonos para proteger los oídos y hacerse pruebas de cernimiento anuales para monitorear la audición o largo de la vida. Recuerden que ruidos que alcancen los 85 decibeles o más son detrimentales para los oídos”, explicó Gómez.