WASHINGTON (AP) — El presidente Donald Trump dijo el martes que espera decidir “muy rápido” si retirará las tropas estadounidenses de Siria, por considerar que su principal misión era derrotar al grupo Estado Islámico y “casi hemos completado esa tarea”.
Si Trump decide de retirarse de Siria actuaría en contra de los deseos de sus principales asesores.
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De hecho, mientras Trump declaraba ante la prensa en la Casa Blanca, altos funcionarios de Estados Unidos hablaban en otras partes de Washington sobre la necesidad de permanecer en Irak y Siria para exterminar al grupo miliciano, que alguna vez controló extensos territorios en ambos países, y evitar que vuelva a fortalecerse.
En conferencia de prensa con los presidentes de las naciones del Báltico, se le preguntó a Trump si seguía a favor de sacar a las tropas de Siria.
“En lo que respecta a Siria, nuestra misión principal allí fue deshacernos de ISIS”, respondió Trump, refiriéndose al grupo Estado Islámico por su acrónimo en inglés. “Hemos completado esa tarea y tomaremos una decisión muy rápido, en coordinación con otros en el área, en cuanto a lo que haremos”.
La misión es “muy costosa para nuestro país y ayuda a otros países mucho más de lo que nos ayuda a nosotros”, afirmó Trump.
“Quiero salir. Quiero traer a nuestras tropas de vuelta a casa. Quiero comenzar a reconstruir nuestro país”, dijo durante la presentación con sus homólogos de Estonia, Letonia y Lituania. Trump también señaló que las naciones del Báltico son aliadas de Estados Unidos en la coalición contra el grupo EI y “no descansaremos hasta que desaparezca ISIS”.
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Un alto funcionario sirio curdo dijo que Trump hizo sus comentarios en un “momento inadecuado” ya que los milicianos del grupo EI resurgen en el oriente de Siria y en medio de amenazas de Turquía.
Ilham Ahmed, un alto funcionario curdo en la provincia siria de Raqqa, dijo que dicha decisión abriría paso al “caos total en Siria” y pondría en peligro zonas recién liberadas del grupo EI, dándole poder a Turquía para entrar a pueblos controlados por las Fuerzas Democráticas Sirias dirigidas por curdos. Funcionarios del Pentágono han dicho que esto le daría al Estado Islámico el espacio que necesita para reagruparse.
Muchos han advertido que un retiro prematuro de Estados Unidos de Siria permitiría la entrada al país de Irán y Rusia, que han apoyado al presidente sirio Bashar Assad. La continua presencia de Irán en Siria es particularmente preocupante para el vecino Israel, un aliado de Estados Unidos que considera a Teherán una amenaza a su existencia.
El general Joseph Votel dijo en conferencia en el Instituto para la Paz de Estados Unidos que el país tendría que continuar con su trabajo contra los remanentes del Estado Islámico en el oriente de Siria. Votel está al frente del Comando Central de Estados Unidos, que supervisa los operativos militares en el Medio Oriente, incluido Siria.
Votel dijo que la campaña militar ha sido exitosa en gran medida, pero no ha concluido.
“La parte complicada, creo, la tenemos por delante, y es estabilizar estas áreas, consolidar nuestras ventajas, regresar a la gente a sus casas, abordar los temas a largo plazo” como la reconstrucción de pueblos y ciudades muy dañadas por la lucha.