Convocados por el grupo independentista radical Comités de Defensa de la República, los manifestantes se congregaron sobre las Ramblas de Barcelona y se encaminaron hacia la sede de la Comisión Europea en la ciudad catalana.
Los manifestantes entonaban estribillos en los que reclamaban la libertad de los presos políticos y exigían la libertad del expresidente Carles Puigdemont. Luego, frente a la representación de la comisión, gritaban: “¡Esta Europa es una vergüenza!“.
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Puigdemont fue detenido este domingo en Alemania, en virtud de un mandato europeo de arresto emitido por España, donde el viernes fue formalmente acusado de rebelión junto a otros 12 dirigentes separatistas.
“Lo que nos están haciendo estos días es totalmente desmedido. Nos tratan como a criminales por querer la independencia. Ya no es cuestión de ideologia sino de respeto a los derechos humanos, dijo” entre lágrimas Rosa Vela, una profesora de 60 años, citada por la agencia AFP.
Judith Cárpena, estudiante de arquitectura, advirtió a quienes se oponen a la independencia de Cataluña que “no canten victoria“. “No es el fin del independentismo, ni mucho menos. El independentismo lo lidera el pueblo y a todos no nos pueden encarcelar. Habra otros Puigdemont“, señaló.
En las calles catalanas se vivían momentos de tensión y cargas policiales. Según El País, los independentistas convocados por los “comités de defensa” se concentraron ante la delegación del Gobierno en Barcelona, en la confluencia de Pau Claris con Mallorca, donde habían tomado posición varias furgonetas de antidisturbios de los Mossos d’Esquadra.
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