El cuerpo de un hombre de 49 años, asesinado en un confuso incidente en el residencial Ramos Antonini, fue expuesto de una manera inusual en la funeraria Marín en Hato Rey.
Juan Ocasio era fanático de la lucha libre y su padre decidió que este fuera velado con una máscara de luchador en su rostro.
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Otras máscaras que pertenecían a Ocasio también fueron expuestas en su ataúd.
Otros difuntos han tomado fama en la isla tras ser velados parados, en una grúa, ambulancia, una mesedora y hasta jugando dominos, entre otros.