WASHINGTON – El senador republicano Marco Rubio se manifestó el viernes a favor de un golpe de las fuerzas armadas venezolanas para derrocar al presidente Nicolás Maduro.
“El mundo apoyaría a las fuerzas armadas en #Venezuela si deciden proteger al pueblo y restaurar la democracia removiendo al dictador”, reza uno de los siete mensajes publicados en la cuenta de Twitter del republicano de Florida la mañana del viernes.
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Tres de los mensajes incluyen citas atribuidas al prócer de la independencia latinoamericana Simón Bolívar, tales como “siempre es noble conspirar contra la tiranía”.
The Associated Press llamó a la oficina de Rubio para consultarlo por sus declaraciones pero no obtuvo una respuesta inmediata.
Los comentarios de Rubio ocurren justo una semana después de que el secretario de Estado Rex Tillerson asomara la posibilidad de que los militares venezolanos impulsen lo que calificó de “transición pacífica” en la nación sudamericana.
“Si eso ocurrirá o no, no lo sé”, dijo Tillerson la semana pasada durante una sesión de preguntas tras pronunciar un discurso sobre América Latina en la sede de Universidad de Texas en la ciudad de Austin.
Todd Robinson, el nuevo encargado de negocios de Estados Unidos para Venezuela, dijo la víspera en Caracas que tiene planes de trabajar por el retorno de la democracia y la recuperación de la economía.
Robinson agregó que la comunidad internacional está lista para brindar ayuda humanitaria a Venezuela.
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El economista venezolano Ricardo Hausmann, director del Centro para el Desarrollo Internacional de la Universidad de Harvard, escribió el mes pasado en www.project-syndicate.org -una página de internet que publica columnas de opinión de líderes políticos, académicos, empresarios y activistas- a favor de una intervención militar internacional que deponga a Maduro de una manera semejante a como los países aliados desterraron al nazismo de Europa durante la Segunda Guerra Mundial.
El Departamento de Estado rechazó la víspera la convocatoria de las autoridades venezolanas a celebrar elecciones presidenciales el 22 de abril, en las que Maduro buscará la reelección.
La convocatoria a elecciones sepultó la posibilidad de un acuerdo entre el gobierno y la oposición que era promovido por la comunidad internacional como una salida a la crisis política y económica del país que amenaza con agravarse por el eventual endurecimiento de las sanciones de Estados Unidos y la Unión Europea.
La emigración venezolana se ha disparado después de que Maduro adoptó medidas para consolidarse en el poder mientras la economía nacional se ha reducido a la mitad durante los últimos cinco años.