“Este es el principio del proceso que nos va a exonerar de la persecución que hubo en nuestra contra”.
Estas fueron las expresiones de Uroyoán Walker Ramos, expresidente de la Universidad de Puerto Rico (UPR), a su salida del Tribunal de Primera Instancia de San Juan, donde ayer dos letradas de la Oficina del Fiscal Especial Independiente presentaron cargos en su contra por presuntas ilegalidades a la hora de otorgar las Becas Presidenciales de la institución.
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Junto a él también fue señalado Carlos Severino Valdés, exrector del Recinto de Río Piedras del primer centro docente del territorio, y cuyo abogado se unió a las palabras del expresidente universitario.
“Hay una cuestión política. Hay uno de los testigos que salió en cuanto programa de radio había, incluyendo uno que tiene, despotricando contra la universidad porque él ve detrás de toda piedra de la universidad a Tony García Padilla”, declaró Hanry Anduze, encargado de la defensa de Severino Valdés. Este último decidió no hablar cuando terminó la vista para encontrar causa probable para arresto, dirigida por la magistrada Geisa Marrero.
Por su parte, José Velázquez, defensor de Walker, decidió enfilar sus cañones contra el analista y abogado Carlos Díaz Olivo, que figura en la lista de 16 testigos de las fiscales Iris Meléndez Vega y Zulma Fuster Troche.
“A mi me sorprendió ver en la lista de testigos a una persona que es un analista político. Lo que ha hecho es despotricar contra mi representado. Ustedes, que son periodistas, que llevan la información como es, un analista político que está haciendo especulaciones ha conllevado en el día de hoy que se sometan unos cargos”, inquirió Velázquez. Al tiempo, criticó que la fiscalía optó por presentar el caso a través de declaraciones juradas.
“A mi me hubiese encantado contrainterrogar en el día de hoy a Carlos Díaz Olivo”, declaró.
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Postergado el caso
De otra parte, hasta el martes a las 9:00 a.m. no se conocerá el rumbo del caso contra ambos académicos, pues la jueza Marrero se tomará unos días para analizar prueba –posiblemente– exculpatoria presentada por los abogados de la defensa, quienes argumentan que la Oficina del Panel del Fiscal Especial Independiente (excluyó de su cintillo de evidencia un informe de la licenciada Mercedes Bauemeinster sobre el asunto.
Los cargos presentados por el ministerio publicó incluyen violaciones a la Ley de Ética Gubernamental por conceder beneficios para otros fuera del cumplimiento de ley. También, por interferencia indebida a las operaciones gubernamentales.
Walker Ramos, por otra parte, enfrenta un cargo por malversación de fondos, por el dinero que se otorgó al entregar las becas.
Durante la administración de ambos se entregó, de manera supuestamente irregular, las llamadas “Becas Presidenciales” a Carlos Pagán, quien estuvo directamente relacionado con Antonio García Padilla, expresidente de la UPR y hermano del entonces gobernador Alejandro García Padilla.
También se beneficiaron Mónica Sánchez Sepúlveda, sobrina de Jorge Sánchez, presidente de la Junta de Gobierno de la universidad y Arturo Ríos Escribano, quien fue funcionario en La Fortaleza.
Antes de comenzar la vista para encontrar causa probable, más de una veintena de profesores se reunieron a las afueras del lugar para apoyar solamente al exrector Severino Valdés. Durante el acto de protesta, los manifestantes destacaron las ejecutorias profesionales del también geógrafo y aludieron a que es víctima de persecución política
