El senador del Partido Nuevo Progresista (PNP), Ángel ‘Chayanne’ Martínez Santiago, le solicitó a la Oficina del Panel del Fiscal Especial Independiente (OPFEI) que aplique todo el peso de la ley en contra del expresidente de la Universidad de Puerto Rico (UPR), Urayoán Walker, quien utilizó su puesto para conceder jugosas becas presidenciales de manera ilegal y contrario a las normas institucionales.
“La acción del FEI confirma el patrón de corrupción pública que dirigió el Partido Popular Democrático desde la UPR el cuatrienio pasado. Esperamos que a este funcionario le caiga todo el peso de la ley por haber defraudado la confianza del pueblo de Puerto Rico. La pasada administración avaló esta conducta, porque en medio de esta controversia, ni el entonces gobernador, Alejandro García Padilla o el candidato a la gobernación, David Bernier, les pidió la renuncia. Para el partido popular, la corrupción fue la orden del día y en vez de querer erradicarla, prefirieron encubrirla”, comentó Martínez Santiago a través de declaraciones escritas.
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En febrero de 2016, el también legislador por el Distrito de Arecibo radicó sendas querellas, ante Ética Gubernamental y el Departamento de Justicia en contra de Walker, así como contra el también expresidente de la Junta de Gobierno de la UPR, Jorge Sánchez, por alegadamente favorecer a un selecto grupo de estudiantes para otorgarles la mencionada beca presidencial.
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“Estamos satisfechos con la determinación del FEI en radicar cargos criminales en este caso. No existe espacio para la corrupción pública en la isla, ninguno. Esperamos que, con esto, finalmente se termine la era de apadrinaje en la Universidad, nuestro primer centro docente”, señaló el líder estadista.
De acuerdo con información disponible, los jóvenes Carlos Pagán, quien fuera asistente de Antonio García Padilla, y Arturo Ríos Escribano, que fue asesor del Gobernador en temas de asuntos laborales hasta 2014 recibieron cuantiosas becas sin tener los requisitos para las mismas. El monto de la beca otorgada a Pagán ascendió a los $40 mil, aunque la solicitud inicial fue de $65,580. Otra que recibió la beca fue Mónica Sánchez, sobrina del expresidente de la Junta de Gobierno.
Según reza de un informe de la OEG, Walker determinó conceder el beneficio de la Beca Presidencial a Sánchez Sepúlveda, a pesar de que el comité no recomendó que se le otorgara dicho beneficio”.
Mientras que, en el caso de Pagán, el informe resalta que a pesar de que no cumplía con dos de los tres requisitos de la Certificación, fue el único becado a quien Walker llamó directamente para preguntarle cuánto dinero necesitaba.
