El Movimiento Independentista Nacional Hostosiano y la Juventud Hostosiana denunciaron un alegado triunvirato para el fraude entre el Departamento de Viviendas, FEMA y la Asociación de Contratistas de Puerto Rico con el proyecto “Tu Hogar Renace”.
“Nos llega información de entero crédito que estas tres instituciones se han reunido y acordado este proyecto, el cual tiene la intención de manejar más de 1.5 billones de dólares entre algunos amigos del gobierno” así expresó Angel Pérez Soler, copresidente de la organización.
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Este indicó que la reunión se acordó repartir esa cantidad en no más de diez compañías.
El parámetro para escoger las compañías es que estás tienen que tener un capital de cien millones para ser consideradas. El cuestionamiento de los Hostosianos, señalaron en declaraciones escritas, es a fines de conocer “quiénes en este país tiene ese capital”.
El MINH señaló que lo que terminará pasando es que compañías fuera de Puerto Rico vendrán a coger estos contratos “mostrando una vez más el nivel de corrupción que hay entre el gobierno de Puerto Rico y el gobierno de Estados Unidos”.
El jueves, 9 de noviembre, la Asociación de Contratistas y Constructores se reúne en San Juan y estará presente el gobernador Ricardo Rosselló.
“Esto nos huele a otro fraude como el destapado en las pasadas semanas con Whitefish”, sostuvo Pérez.
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Hace unos días, ese organismo político emitió una declaración en la que señaló que el huracán María “dejó al desnudo la incapacidad, insuficiencias y las enormes limitaciones del gobierno de Puerto Rico. Como si fuera poco, también ha salido a flote el desprecio, la burla y la indolencia del gobierno de Estados Unidos, responsable principal de las carencias políticas y económicas del pueblo puertorriqueño”.
“Ha quedado en evidencia la ausencia de planificación y el torpe manejo del embate de un huracán intenso, como si el archipiélago borincano no estuviera en el Caribe, precisamente en la ruta de tormentas y huracanes. Claramente, ni el gobierno ni las agencias federales disponían de planes para responder a los distintos escenarios:
El MINH denunció que no se contemplaron las medidas de contingencia frente al colapso de los suministros de combustibles, agua, alimentos y materiales de primera necesidad, tampoco se previó el colapso de las telecomunicaciones y sus graves consecuencias en la atención y coordinación de las respuestas.
Por otro lado, el supuesto mayor acto de negligencia fue que nada se planificó ante el desplome de la infraestructura de energía eléctrica.
A ese momento, indicó, “la incertidumbre lejos de amainar, crece. La información sobre el estado del País y de la recuperación de los servicios básicos, es confusa y contradictoria. El riesgo y la amenaza de enfermedades causadas por la inoperancia de los sistemas de tratamiento a las aguas usadas y potable, es real y creciente. A lo que se suma la fragilidad con la que están funcionando los pocos hospitales en servicio”.
