SONOMA, California, EE.UU.— Los incendios forestales que van camino de convertirse en los más letales en la historia del estado de California, podrían cobrar impulso el jueves y revertir los modestos avances registrados por los bomberos.
Se pronostica que los vientos constantes de hasta aproximadamente 45 kilómetros por hora (72 millas por hora) llegarán a zonas al norte de San Francisco, donde los incendios se cobraron la vida de al menos 23 personas y destruyeron 3.500 viviendas y negocios.
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La situación “va a seguir empeorando antes de mejorar”, dijo el jefe de los bomberos del estado, Ken Pimlott, el miércoles.
Ciudades enteras se convirtieron en pueblos fantasma tras su evacuación. Sus calles quedaron desiertas y el único movimiento era el de la suave lluvia de cenizas.
Una de ellas es Calistoga, una ciudad de 5.300 habitantes, conocida por las degustaciones de vinos y las aguas termales. Todos tenían orden de evacuar. Algunos, al partir, dejaron galletas para los bomberos y mensajes de “por favor, salven nuestro hogar”.
Los 22 incendios ocupaban más de 686 kilómetros cuadrados (265 millas cuadradas) al iniciar su cuarta jornada totalmente fuera de control. La tecnología de punta y las estrategias que mantuvieron los niveles de destrucción y las cifras de muertes en niveles bajos en los últimos años no han podido con semejante voracidad.
“Estamos viendo vegetación explosiva”, dijo Pimlott. “Que nadie se equivoque, este es un evento grave, crítico, catastrófico”.
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La lluvia de cenizas en el valle de Sonoma cubría los parabrisas a medida que el viento adquiría la velocidad potencialmente catastrófica de 48 kilómetros por hora (30 milla). Innumerables vehículos de emergencias, con las sirenas encendidas, avanzaban velozmente hacia las llamas mientras los evacuados huían en autos atiborrados de sus pertenencias.
El vocero de los bomberos, Daniel Berlant, dijo que ardían 22 focos de incendios el miércoles, comparado con 17 el día anterior. Las autoridades temen que distintos focos se unan en incendios aún más grandes.