El huracán María trajo la fortuna para la familia Sánchez Márquez de Caguas, luego de que Roberto Sánchez comenzara a elaborar tablas de lavar a mano, un instrumento que se ha hecho necesario ante la emergencia que se llevó el servicio de energía eléctrica en todo el país.
Sánchez contó a Metro desde su casa en el barrio Barras que trabaja como constructor, pero quedó sin empleo ya que la empresa no ha reanudado labores desde el paso del huracán. “Hace 20 años hice las primeras. Y ver la necesidad de los demás… y es un ingreso para mi familia. Entonces volví a reinventar las tablas que hice hace 20 años”, expuso el constructor mientras sostenía una tabla de lavar a mano que hizo tras el paso del huracán Georges hace 19 años.
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Este contó que ya tenía en mente volver a construir las tablas porque le había resultado en el pasado y que a dos días del paso de María comenzó la producción con su familia. En la marquesina de su hogar su esposa, hijos, cuñadas, sobrinos y hasta los suegros colaboraban en la tarea de lijar las tablas que ya había construido el cagüeño. Alrededor de 10 personas colaboran en el taller improvisado en el hogar de los Sánchez.
De igual forma, su esposa, Yamilette Márquez, manifestó que su hermana la ha ayudado a contestar las incesantes llamadas de clientes que buscan las tablas para poder lavar. También dijo que han recibido acercamientos de dos ferreterías que deseean vender el producto en momentos en que más del 90 % de la isla no cuenta con servicio de energía eléctrica.
“Mi hermana le tiró una foto a una, la puso en las redes sociales y ahí comenzaron a contactarse con ella”, precisó Márquez.
El constructor comentó que algunos de los miembros más jóvenes de su familia nunca habían visto una tabla de lavar. “Ahora saben lo que sucede cuando no hay luz para lavar”, bromeó.
“Empiezo como desde las 8:00 de la mañana, luego le doy un descanso a la planta, porque también la uso de noche. Ya a las 4:00 a 4:30 de la tarde paro la producción, precisó sobre las tablas que vende a $20. Asimismo, dijo que actualmente trabaja por orden y que entrega al día siguiente el producto. Su esposa y una prima también han ayudado a la promoción de las tablas promocionándolas en las redes sociales.
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Espera ayudar a otros con su negocio
Sobre los paneles, Sánchez expresó que tiene un amigo que le vende madera diariamente. El emprendedor sostuvo que aunque no ha sacado números de inversión y ganancias, espera compensar la compra de los materiales y el combustible que necesita para elaborar la herramienta de antaño.
“Espero compensarlo. Así cada cual tiene su ingreso ya que ahora mismo no hay trabajo. A base de eso puedo ayudar a otras personas a que tengan un ingreso”, resaltó Sánchez sobre las tablas que confecciona con madera de pino y PVC.
Finalmente, Sánchez agradeció a su familia “por darme la mano y ayudar en la necesidad a los demás. Que en cada hogar pueda llegar una”.
Para más información se pueden comunicar al 787-642-4733.
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