Inconsciente, abandonado en la calle y con un fuerte olor a alcohol. Así encontró la policía a un estudiante de la Universidad de Pensilvania, miembro de la fraternidad “Delta Tau Delta”. Según las primeras investigaciones el joven habría participado de uno de los ritos que celebran estas casas de convivencia dentro de los campus, quedando en coma etílico sin que sus compañeros le prestaran ayuda.
A través de un comunicado la universidad aseguró que “la investigación confirmará si la fraternidad fue la responsable de darle alcohol al recién ingresado”
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El alumno fue rápidamente traslado a un centro médico dónde aún permanece internado, recuperándose de las lesiones internas y externas de la alcoholizada noche de fraternidad.
La universidad decidió suspender a “Delta Tau Delta”, debido a la estricta prohibición que tenía la institución de beber alcohol como consecuencia de la muerte de uno de sus alumnos en una fiesta similar en febrero de este año.
El caso de Timothy Piazza
Estudiante de 19 años de la fraternidad “Beta Theta Pi”. Cursaba su primer año en la universidad y en uno de los rituales de iniciación lo obligaron a tomar una “peligrosa cantidad de alcohol”. Timothy Piazza quedó en absoluto estado de ebriedad y cayó rodando por un montón de escalones.
Sus compañeros de “hermandad” no hicieron el llamado oportuno a emergencias y el joven recibió atención médica 12 horas después de la caída. Dos días más tarde Piazza fallecería marcando un hito negro para las fiestas universitarias.
El abogado querellante informó en esa oportunidad que 18 de los compañeros de Piazza serían acusado con más de 850 cargos. Además se descubrió que los compañeros borraron sus mensajes de whatsapp y facebook para evitar ser descubiertos sobre su negligente actuar.
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Por su parte la Universidad de Pensilvania decidió la prohibición absoluta de consumo o posesión de alcohol dentro del campus y extremó sus medidas de control sobre los estudiantes.
