El representante José Aponte Hernández le solicitó al Presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, que aumente la ayuda que actualmente el gobierno federal está enviando a Puerto Rico a razón del impacto del poderoso huracán María hace dos semanas.
Mediante un comunicado de prensa, el también presidente de la Comisión de Asuntos Federales, Internacionales y de Estatus pidió al Primer Mandatario estadounidense que equipare la ayuda que recibe la isla, un territorio no incorporado desde el 1898, con la que recibieron los estados de Texas y la Florida durante el azote de los huracanes Harvey e Irma respectivamente.
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“Puerto Rico se merece toda la ayuda posible. Los recursos del gobierno federal, todos ellos, deben estar aquí, trabajando para asistir en la recuperación de nuestra isla. Sabemos que ya se ha enviado ayuda y que hay sobre 7 mil efectivos federales, pero se necesita más. Se tienen que enviar más personas que puedan atender la emergencia como lo hicieron en Texas para poder subir la red de comunicaciones. También se tiene que enviar el destacamento que se envió a la Florida para reparar en 10 días el sistema eléctrico. Esa es la ayuda que necesitamos”, señaló Aponte Hernández a través de declaraciones escritas.
El líder estadista también exhortó a Trump aumentar las asignaciones que reciben el programa Medicaid, incrementando el nivel de reembolso, del actual 55 por ciento, a 83, igualando lo que es el mínimo que se envía a los estados.
Aponte Hernández además pidió ayuda federal para los programas de educación, particularmente para aquellos de educación especial, los cuales se vieron severamente afectados por el impacto del ciclón María.
“La ayuda no se puede quedar en suministros, que es algo que necesitamos. También tiene que expandirse a los programas de asistencia social, como Medicaid, y el Programa de Asistencia Nutricional (PAN), al igual que los de los vouchers de vivienda. Hay mucha necesidad y eso aumentará mediante pase el tiempo. Por eso necesitamos un total compromiso del Presidente Trump. Los ciudadanos americanos de Puerto Rico no esperan menos”, concluyó diciendo.