LUQUILLO, P.R. – Desde tempranas horas de la mañana el alcalde de Luquillo, Jesús Gerardo Márquez, visitó las zonas inundables de su pueblo con el propósito de desalojar a la población ante el paso del huracán Irma.
Según el mandatario, varios ciudadanos han respondido al llamado de las autoridades y se movilizaron a los refugios del pueblo que lidera. Empero, otros optaron por quedarse en sus hogares, aunque viven en espacios cercanos a la costa.
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“Tengo que reconocer que muchas personas han tenido conciencia de la peligrosidad que enfrentamos todos con la amenaza del huracán. Pero siempre hay alguna gente que resiste porque no quieren abandonar lo material. Este es el momento de pensar en la vida”, subrayó Márquez.
Entre los lugares que visitó hoy el ejecutivo municipal está el barrio Fortuna Playa, el cual describió como “uno de los lugares más vulnerables que tiene el municipio”.
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De acuerdo al alcalde, en temporadas de invierno, sin enfrentar la amenaza de fenómenos atmosféricos de la magnitud del huracán Irma, la marea sube y se introduce en las residencias.
En el lugar, que queda justamente al frente de la playa, Metro pudo constatar que al menos tres familias se negaron a desalojar.
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Actualmente, Luquillo tiene disponibles las escuelas Isidro Sánchez y Camilo Valle como refugio. La primera de estas ya la población comenzó a habitarla por el paso del huracán. Al momento de Metro visitar el refugio constató la presencia de 33 personas.
De ser necesario, el municipio también habilitará la escuela Pablo Suarez.
Se prevé un fuerte oleaje
En las costas de Luquillo ya comenzaron los estragos del huracán Irma. El oleaje de la Playa la Pared, de acuerdo a Jorge Pabón, líder de la organización Luquillo Surf Rescue, podría llegar a unos 10 o 12 pies de altura.
De acuerdo al experimentado surfer, es probable que en horas de la tarde el mar alcance la carretera.
A pesar de las múltiples advertencias, ciudadanos se han acercado poco a poco a la costa a observar el mar.
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