NUEVA YORK — La tormenta tropical Harvey golpeó a los estados de Texas y Luisiana, pero las redes de telefonía celular resistieron el embate y siguen funcionando. Las grandes operadoras trasladaron equipos adicionales y generadores eléctricos a la zona y recurrieron a drones para diagnosticar problemas.
Cuatro condados de la costa texana del Golfo de México ubicados al noreste de Corpus Christi tenían más de la mitad de sus torres celulares caídas hace unos días, pero los técnicos lograron recuperar muchas de ellas. En toda la región afectada, solo el 4% de las torres de telefonía estaban fuera de servicio. En el condado de Harris, en Houston, la cifra ascendía al 5 %.
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Si bien los servicios de telefonía celular estaban bien, cientos de miles de personas perdieron servicios telefónicos de línea fija u otros servicios comunicacionales. Algunos centros receptores de llamadas telefónicas de emergencia tuvieron que trasladar sus servicios a otras localidades y tres canales de televisión perdieron la capacidad de transmisión.