El estado ruso nunca ha participado en ciberataques, aseguró el jueves el presidente de Rusia, Vladimir Putin, en una reunión con editores de alto nivel de agencias internacionales de noticias.
El mandatario ruso agregó que su gobierno esperará a que pase la tormenta política en Estados Unidos para poder forjar buenas relaciones con el presidente Donald Trump, al que alabó como alguien de discurso franco que ve al mundo “con un nuevo punto de vista”.
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En cuanto a las supuestas infiltraciones, Putin dijo que algunos hackers “patriotas” podrían lanzar ataques dadas las malas relaciones entre Rusia y Occidente.
Sin embargo, reiteró con firmeza que “no participamos en eso a nivel de estado”. Añadió que “ningún hacker puede influir en las campañas electorales de ningún país de Europa, Asia o América”.
“Me imagino que habrá gente que lo hace deliberadamente, creando una serie de ataques para de tal manera presentar a Rusia como el origen de esos ataques”, dijo Putin. “Con las nuevas tecnologías, eso se puede hacer fácilmente”.
El mandatario ruso dijo que “esta histeria ruso-fóbica” hace “bastante difícil la cooperación e incluso el diálogo” con otros líderes mundiales.
“Es algo que está teniendo su impacto, y me temo que ese es uno de los objetivos de los que están detrás de esto. Manipular la opinión pública para su propio beneficio, crear una atmósfera que impida la colaboración en ciertos temas, como por ejemplo el terrorismo”, dijo el líder ruso.
Esperanzas de diálogo productivo con Estados Unidos
Manifestó sus esperanzas de mejorar las relaciones con Occidente y de entablar un diálogo productivo con el presidente Trump.
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“Esto va a pasar, tarde o temprano”, dijo Putin. “Tenemos paciencia, sabemos esperar, y vamos a esperar”.
Agencias de inteligencia de Estados Unidos han acusado a Rusia de atacar los servidores de email del Partido Demócrata para ayudar a impulsar la victoria electoral del actual presidente, Donald Trump.
Putin advirtió que los intentos de contener a Rusia no tendrán éxito.
Sin mencionar a ningún país en concreto, el presidente afirmó que Moscú ha afrontado intentos de dañar sus intereses legítimos.
Las relaciones de Rusia con Occidente están en su peor momento desde la Guerra Fría debido a la crisis en Ucrania. Estados Unidos y la Unión Europea han impuesto sanciones a Moscú por su anexión de la península ucraniana de Crimea y su apoyo a la insurgencia prorrusa en el este de Ucrania.
Estas sanciones, afirmó, no han tenido ningún efecto sobre Rusia. Putin predijo que las tensiones actuales terminarán por suavizarse porque “son contraproducentes y perjudiciales”.
Por otro lado, Putin señaló que el despliegue de tropas rusas en un grupo de islas del Pacífico también reclamadas por Japón responde a su preocupación por el incremento de la presencia militar estadounidense en la región.