El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se convirtió hoy en el mandatario estadounidense en visitar el Muro de las Lamentaciones en Jerusalén, uno de los lugares más sagrados del judaísmo.
Trump se encuentra en Israel, como parte de su primer viaje al exterior como presidente. Se trata de se segunda parada, luego de visitar Arabia Saudí.
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Con una Kipá sobre la cabeza –gorra ritual usada por los varones judíos– el presidente estadounidense se acercó al Muro, puso mano, se inclinó ligeramente y cerró los ojos.
La primera dama de Estados Unidos, Melania Trump, también visitó el Muro y tanto ella como Trump dejaron notas en el lugar sagrado.
La hija del presiente, Ivanka Trump, también visitó el Muro.
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De acuerdo a CNN, a pesar de peticiones de funcionarios israelíes, Trump visitó el también llamado Muro Occidental sin ningún funcionario del gobierno israelí a su lado. Estados Unidos no reconocen a Jerusalén como la capital de Israel.
El muro se encuentra dentro de Jerusalén, una ciudad sagrada tanto para judíos, musulmanes y cristianos. Pero la soberanía de dicha ciudad es uno de los principales asuntos que mantiene el conflicto entre Israel y Palestina, debido a que ambos reclaman la pertenencia de Jerusalén Oriental.
