El alcalde de Toa Alta Clemente “Chito” Agosto anunció un plan estratégico de reducción de gastos y jornada laboral para mantener los servicios a la ciudadanía, y estabilizar la situación fiscal de la ciudad.
El ejecutivo municipal anunció las medidas de emergencia fiscal, tras explicar en teatro municipal, con detalle a los empleados del municipio y directores, la situación por la que atraviesa el pueblo.
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“Es una decisión difícil que estamos atendiendo para mantener los servicios y empleos de nuestros empleados” comentó el alcalde de Toa Alta.
Añadió que “la terrible situación económica a nivel nacional nos obliga a tomar medidas, incomodas, más responsables y necesarias para poder continuar con las operaciones a nivel municipal”.
Esta es la tercera vez que la ciudad de Toa Alta se ve obligada a tomar acciones de reducción de jornada y gastos, siendo las primeras bajo la administración municipal de Gilberto Díaz Narvaez y Ángel Rodríguez (Buzo).
Agosto detalló, que ante la terrible situación que vive el país, que ha arrastrado a los municipios, debido a la congelación o suspensión de partidas asignada a los municipios, se implementó un plan de Emergencia y Estabilización Fiscal que permita mantener los servicios, reduciendo gastos operacionales.
El alcalde puntualizó que el plan que busca mantener los servicios que ofrece la ciudad se encuentra la cancelación de actividades y eventos, la congelación de donativos, reducción de contratación de servicios profesionales, la limitación de contratación de empleados, la consolidación de dependencias, la reorganización de servicios, así como la reducción de la jornada laboral a 4 horas diarias.
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El alcalde de Toa Alta detalló que la decisión de implementar un plan se debe a congelaciones de asignaciones por parte del gobierno estatal a los municipios, lo que afecta directamente los ingresos a las arcas.
Agosto detalló que el municipio dejó de recibir casi un millón de dólares tras la congelación de asignaciones del Departamento de Hacienda; así como la paralización de la aportación de un millón de dólares para operar el CDT por parte del Departamento de Salud; la congelación de nueve millones de dólares, pertenecientes al municipio, congelados por el Banco Gubernamental de Fomento destinados a pagar a suplidores.
Por otro lado, la falta de consenso en el CRIM retraso el proceso de ventas de cuentas morosas lo que afecta el presupuesto operacional por casi cuatrocientos mil dólares, que sumado a la reducción de recaudos del IVU de casi ochenta mil dólares ha llevado al municipio a enfrentar difícil situación.
El Primer Ejecutivo Municipal informó a los empleados en una presentación en el Teatro Maso Rivera, donde también ofreció un plan de orientación a los empleados. “Tenemos fe, que las medidas serán temporeras, y pondremos nuevamente en buen estado a nuestra ciudad”, concluyó Clemente “Chito” Agosto.