El Consejo General de Estudiantes del Recinto de Rio Piedras de la Universidad de Puerto Rico condenó hoy la aprobación del Proyecto del Senado 211. Dicho proyecto confiere poderes al Director Ejecutivo de la Autoridad de Asesoría Financiera y Agencia Fiscal de Puerto Rico conocida como AAFAF para dictar política publicas fiscales acorde con el Plan para Puerto Rico y la Ley PROMESA en todas las agencias y corporaciones públicas incluyendo la Universidad de Puerto Rico.
Su reacción surge luego que este diario reseñara sobre el proyecto de ley radicado en el Capitolio por el Ejecutivo que daría la potestad al gobernador de remover a miembros de las juntas de gobierno que no sean afines a las políticas públicas de La Fortaleza.
PUBLICIDAD
“Básicamente este Proyecto (el 211 del Senado) le da poder absoluto al Director Ejecutivo de AAFAF a meterse en cualquier ente de gobierno, botar gente, congelar presupuesto, transferir dineros y derogar reglamentos. En ese caso, la Universidad de Puerto Rico sería vista como una agencia mas donde la intervención política partidista forma parte de la orden del día.”, declaro Wilmarí de Jesús, Presidenta del Consejo General de Estudiantes.
El cuerpo estudiantil levantó serios cuestionamientos en cuanto a la futura intervención de la nueva entidad fiscal en la Universidad y especialmente el artículo 11 del Proyecto que da inmunidad judicial al director ejecutivo y a los miembros de la agencia.
“Mientras toda la atención de los medios y del país recaía en la Cámara de Representantes donde se atendía atropelladamente en una Vista Pública la Reforma Laboral, el Senado de Puerto Rico aprobó el Proyecto por descargue y sin vistas públicas a escondidas del pueblo.” –sentencio José Ángel Morales González, Presidente del Consejo de Estudiantes de la Escuela de Arquitectura.
El CGE objetó la posibilidad de que cualquier persona externa a la UPR pueda tener información confidencial o privilegiada de estudiantes o de la UPR, sin que medien garantías que protejan los derechos de los estudiantes; además que puedan incidir en la aprobación de presupuestos, derogación de reglamentos y/o políticas institucionales.
“Esperamos que la Cámara de Representantes sea responsable con la evaluación de este proyecto y lo rechace en su totalidad. La comunidad universitaria debe ser parte de las iniciativas para atajar la crisis, y no debe responder a presiones externas que puedan poner en riesgo los mejores intereses de la institución.”, concluyeron los líderes estudiantiles.
