El exgobernador Pedro Rosselló González, quien llegó al Capitolio para presenciar la juramentación de su hijo Ricardo Roselló Nevares como nuevo gobernador de la isla, comentó que su mandato “va a enfrentar una ruta muy dura de aquí en adelante”.
“Va a enfrentar una ruta muy dura de aquí en adelante. Tengo una felicidad que está balanceada con un sentimiento de preocupación”, dijo Rosselló González.
El exmandatario dijo que su hijo entra a un “campo controvertido como es la política y se expone a situaciones muy difíciles. Tengo encontrados sentimientos, pero prevalece una alegría”.
En cuanto a las designaciones, opinó que “las esta manejando de manera excelente”.
Rosselló Nevares es el primer hijo de un gobernador en ocupar el cargo y juramentó anoche como el duodécimo gobernador de Puerto Rico.
