El becario presidencial Arturo Ríos Escribano rechazó el viernes conocimiento sobre alguna irregularidad en la concesión para la beca otorgada a su persona por la Universidad de Puerto Rico (UPR) y por la cual destituyeron al presidente, al rector del Recinto de Rio Piedras y otros funcionarios.
“El proceso que realicé para la solicitud de la Beca Presidencial, fue el que se me notificó. Si ese proceso estuvo plagado de errores, o hubo gestiones administrativas contrarias a las Reglamentaciones vigentes, no me constó, ni me consta, porque no controlaba dichos procesos y gestiones”, dijo Ríos Escribano en comunicación escrita.
“El Informe contiene errores y omite información importante que fue sometida, por lo que próximamente estaré cursando una carta a la Comisión y a la Junta de Gobierno sobre este particular.
“Surge del Informe, que la doctora Palmira Ríos, alegadamente expresó haber recibido “presiones” para que se me otorgara una plaza, y que rechazaba el proceso que se había dado para la otorgación de las Becas Presidenciales. Si esa información es cierta, ella tiene la obligación de revelar quién la llamó y cuándo ocurrió esa llamada. Si la información no es cierta, resulta indispensable que se clarifique”, añadió.
“Ríos Escribano aseguró que a raíz de los eventos que culminaron con la destitución de varios funcionarios por la concesión de la beca, “me obligan, a pesar de que no existe ninguna imputación sobre mi persona, a renunciar a la Beca Presidencial para desvincularme de un proceso ya carente de legitimidad ante la comunidad universitaria”.