Desde que surgió la denuncia pública sobre irregularidades en el proceso para otorgar las becas presidenciales, Metro ha estado cubriendo cada detalle del desarrollo de la noticia. Lamentablemente, nuestros lectores no han contado con el beneficio de la versión oficial de la Universidad de Puerto Rico (UPR), más allá de la cobertura de las reuniones de la Junta de Gobierno y los comunicados oficiales.
En múltiples ocasiones, durante los pasados meses, nuestros periodistas han solicitado una entrevista con el presidente de la UPR, Uroyoán Walker, quien, de forma inexplicable, no ha accedido a sentarse para realizar un intercambio de preguntas y respuestas con este medio, pero sí lo ha hecho con otros. En un momento dado, se solicitó una junta editorial y, luego de coordinada la fecha, fue cancelada por la oficina del presidente de la UPR sin ninguna explicación o fecha alterna. Nuevamente, vemos al funcionario público seleccionando algunos medios para hablar y limitando el trabajo de otros.
Más importante que una entrevista es el acceso a los documentos públicos. Es por ello que en la tarde de ayer solicitamos formalmente el informe final sobre los procesos de concesión de las becas presidenciales de la UPR que entregaron los contratistas de la Universidad —pagados con fondos públicos— a la Junta de Gobierno. Esperamos que este documento público pueda estar disponible para el pueblo, tal y como lo establece el derecho constitucional a la libertad de prensa.