El licenciado Héctor Luis Acevedo alertó el lunes de un “serio” peligro para las elecciones con el proceso de escrutinio adoptado por la Comisión Estatal de Elecciones (CEE).
Luego de celebradas las primarias del 5 de junio la presidenta de la CEE, Liza García, y los comisionados electorales del Partido Popular Democrático (PPD) y del Partido Nuevo Progresista (PNP) adoptaron un Manual de Escrutinio que se niega a adjudicar un número de votos de conformidad con la intención de los electores y que niega el derecho a recuento manual papeleta a papeleta que ordena la Ley Electoral de Puerto Rico para los candidatos con resultados de 100 votos de diferencia o .5 %.
Explicó que la norma adoptada dispone que los votos que la máquina no lea se quedarán tal como la máquina determine. Indicó que si un elector marca en noviembre un candidato o partido fuera del cuadrante pequeño, la lectura de la máquina va por encima de la voluntad del elector.
“Por ejemplo: un elector vota en la insignia de un partido fuera del cuadrante, ese voto se cuenta en blanco en contra de su clara intención y de las decisiones de los tribunales de Puerto Rico. Otro ejemplo: si un elector vota mixto o sea por un partido y por un candidato de otro partido y su voto por ese candidato queda fuera del cuadrante, se contará como íntegro en contra de la voluntad del elector dos veces, pues le niega el voto al que tiene derecho a ello y se lo cuenta al que no la tiene”, especificó.
Asimismo, indicó que actualmente en el recuento si un elector votó por cuatro candidatos por acumulación en los cuadrantes y por dos bajo su retrato fuera del cuadrante, la máquina se lo cuenta a los primeros cuatro y no se lo cuenta a los últimos dos.
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“Para eso son los recuentos papeleta a papeleta para corregir los errores de los funcionarios de colegio o de las máquinas de escrutinio. La CEE en el entusiasmo de defender las nuevas tecnologías ha cometido el error de buena fe de darle mayor valor a las máquinas que a la certeza de la voluntad del elector. Las máquinas son para aligerar el conteo de votos no para anularla”, dijo.
Acevedo envió una carta a la presidenta de la CEE en la que le recordó que la elección del presidente de Estados Unidos en el año 2000 se decidió por cerca de 500 votos.
“El efecto de estos sistemas en nuestros analfabetas y en personas de mayor edad no es un asunto discrecional sino de impacto constitucional sobre el derecho al voto. Creo que en los próximos años nos moveremos en esa dirección pero tiene que cumplirse con unos criterios para que aumente la participación y no se le quite el derecho al voto a nadie. Tiene que superarse el nivel de adjudicación presente pues no puede invertirse millones de dólares para que cuenten menos votos que el sistema anterior”, sostuvo al indicar la inversión del sistema es de alrededor de 30 millones de dólares.
Concluyó que la mecanización del sistema de escrutinio de votos debe acogerse con atención a las misiones fundamentales de estimular la participación electoral y su contabilidad fiel y pronta respetando la voluntad de los electores. “Caminar ese trecho ha de requerir mucho adiestramiento, garantías de honestidad y voluntad democrática. La lealtad a las máquinas tiene que estar subordinada a la lealtad al voto del elector”, finalizó.