WASHINGTON (AP) — Más de 40 legisladores demócratas tienen previsto boicotear la ceremonia de investidura del presidente electo, Donald Trump, alegando que el empresario republicano es una amenaza para la democracia.
Los legisladores Steve Cohen de Tennessee, Jerrold Nadler de Nueva York y Don Beyer de Virginia se sumaron el lunes a la cada vez más larga lista de congresistas de la Cámara de Representantes que no presenciarán en vivo el juramento de Trump en el Capitolio en viernes. Las bajas aumentaron desde el sábado, cuando el próximo inquilino de la Casa Blanca criticó al legislador John Lewis —una de las figuras más veneradas del movimiento por los derechos civiles de los negros— por cuestionar su legitimidad para ser presidente.
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“Este presidente ‘semielecto’ no merece ser el presidente de Estados Unidos”, dijo Cohen en un comunicado. “No ha demostrado las características y los valores que estimamos. Que estimaba el doctor (Martin Luther) King. Y cuando puso en duda la integridad de mi amigo, colega e ícono de los derechos civiles John Lewis, cruzó el Rubicón”.
La “esperanza y cambio” asociadas con la toma de posesión de Barack Obama hace ocho años han sido sustituidas por “miedo y temor”, dijo Cohen.
Trump y otros republicanos rechazaron las críticas, apuntando que los demócratas son malos perdedores que deben aceptar los resultados de la elección y seguir adelante.
El martes, el presidente electo dijo en Twitter que era mentira que esta fuera la primera ceremonia de investidura de la que se ausenta Lewis desde que llegó al Congreso en 1987. “¡INCORRECTO (o mentira)!”, tuiteó Trump, diciendo que el legislador tampoco fue a la ceremonia de George W. Bush en 2001.
Aunque muchos demócratas estaban furiosos con el resultado de las elecciones de 2000 en las que Bush hijo derrotó a Al Gore tras varios recuentos y un fallo de la Corte Suprema, asistieron a su investidura como 43er presidente.
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Los republicanos asistieron a las dos juramentaciones de Barack Obama.
Nadler dijo en un comunicado que se niega a “permanecer de brazos cruzados mientras (Trump) hace ostentación de su conducta ilícita sin respeto por los intereses del pueblo estadounidense. Me niego a aceptar cualquier esfuerzo de socavar una prensa libre e independiente, que cumple un papel esencial en cualquier sistema democrático y cuyos derechos están garantizados por nuestra Constitución. Me niego a aplaudir a un hombre con una trayectoria de conducta ofensiva y abusiva hacia las mujeres y las minorías”.
