Las autoridades checas afirmaron haber encontrado carne de caballo en las albóndigas vendidas por la empresa sueca de muebles IKEA.
Las albóndigas se hicieron en Suecia, y fueron etiquetadas como carne de res y cerdo.
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El descubrimiento se produce cuando los ministros de Agricultura se reúnen en Bruselas para discutir maneras de solucionar escándalo de caballo que afecta a por lo menos una docena de países.
Todavía no hay ninguna confirmación de cómo la carne de caballo se metió en los productos etiquetados como carne de res.
Francia quiere un etiquetado obligatorio y la introducción de un sistema de rastreo.
