Si alguna vez has estado enamorada o enamorado, sabes que el amor a veces puede llevar a uno al borde de la locura para atraer o conquistar al querido o querida.
Gracias a la revista Quo, aquí presentamos las locuras más increíbles que se han cometido a través de la historia en nombre del amor.
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Descender al infierno
Dante Alighieri, el autor italiano, escribió la Divina Comedia a principios del Siglo 14, dedicándoselo a su amor platónico, Beatrice Portinari. En la obra, Dante atraviesa el purgatorio en busca de su amada, pero en vida real, nunca pudo hablar con ella.
Declararle guerra a su padre y coronar a un cadáver
En el 1355, Pedro I, quien iba a convertirse en rey de Portugal, se enamoró de Inés, la dama de compañía de su esposa, casándose con ella en secreto. Su padre Alfonso IV, para evitar que Inés fuese coronada, la mandó a matar. Al Pedro I enterarse, le declaró guerra a a su padre. El cadáver de Inés fue vestido con vestimentas reales y prendas al ser sentada en el trono. Consecuentemente, nos nobles fueron obligados a homenajearla como la reina de Portugal, besándole su mano fría en símbolo de fidelidad.
Arriesgar su cabeza
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El corsario Walter Raleigh casi pierde su cabeza en las manos de su amante, la reina Isabel I de Inglaterra, en un ataque de celos cuando se enteró que se había enamorado de una joven llamada Sarah. Fue encerrado en la Torre de Londres pero eventualmente la reina terminó perdonándolo.
Escribirle diariamente por años
Mark Twain, el escritor estadounidense, se enamoró de Livy a primera vista. A Livy rechazarlo, prometió escribirle una carta de amor diaria hasta que la convenciera. Tardó dos años en convencerla.
Cesar el trono
En el 1936, Eduardo VIII de Inglaterra renunció su corona para casarse con la estadounidense, Wallis Simpson, quien previamente se había divorciado. El único monarca en la historia de Inglaterra en abdicar voluntariamente su trono.
Mudarse a una cueva y construir una escalera con sus propias manos
En el 1940, el chino Lui Goujiang a los 19 años se enamoró de una viuda de mayor edad. Al ser correspondido el amor, decidieron marcharse y vivir juntos dentro de una cueva. Terminó construyendo con sus propias manos una escalera de 1,500 peldaños para facilitarle el camino a su amada cuando salía de la gruta y caminaba por la montaña.
Convivir con un cadáver
Esta historia de amor y obsesión involucra al médico alemán, residente en Florida, Carl von Cosel, y una de sus pacientes de tuberculosis, María Helena Milagro-Hoyos. Luego de su muerte en 1933, el doctor robó su cadáver y vivió con el cuerpo momificado por 7 años.
¿Qué locura has hecho en nombre del amor?
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