Mientras en diversos recintos de la Universidad de Puerto Rico (UPR) académicos, investigadores y estudiantes trabajan en múltiples proyectos de investigación, en los laboratorios del Recinto de Río Piedras se trabaja en uno que pudiera cambiar la vida de millones de mujeres. Se trata de la búsqueda del desarrollo de dispositivos para la detección temprana del cáncer de útero.
La doctora e investigadora Ramonita Díaz lidera la ambiciosa investigación.
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El cáncer de útero puede confundirse con el de cuello uterino, que es la entrada al útero, mientras que el útero como tal es una cavidad interior de menos acceso. “Para el cáncer de cuello uterino actualmente existen pruebas de detección que las pacientes se pueden hacer con regularidad ante alguna sospecha. Sin embargo, para el cáncer de útero, que muchas veces puede dar comienzo a través del endometrio, no hay una prueba de detección. Muchas veces, en ese caso, lo que se espera es que cuando la paciente muestra síntomas marcados entonces se comience a dar esa investigación”, explicó la doctora Díaz.
Añadió que las pruebas de detección suelen tardar semanas en llegar al médico, por lo que la idea del dispositivo que busca desarrollar a través de la investigación es que el profesional de la salud pueda tener un resultado de una prueba en su propia oficina.
El concepto de la investigación surgió en 2018 debido a que el cáncer de útero estaba rezagado en el área de investigación, pues las pacientes muestran síntomas claros y no había mucha necesidad de investigar a más profundidad. Sin embargo, hay excepciones, como pacientes que pueden estar sufriendo de la condición sin saberlo por no asociar los síntomas con cáncer.
Investigaciones multidisciplinarias
Aunque la investigación es liderada por Díaz, la doctora aseguró que es un trabajo colaborativo con otros doctores, profesores de la UPR y estudiantes. Además, busca colaborar con universidades en Estados Unidos para tener el insumo de otros profesionales en el área.
“Se está tratando de establecer una colaboración con la Universidad de Texas en El Paso. Nosotros podemos estar viéndolo todo desde la parte de química, pero yo tengo un componente biológico que es importante, (también) tenemos ese aspecto médico que a veces tiene unos detalles que necesitamos”, mencionó Díaz.
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Impacto de recortes presupuestarios en capacidad de hacer investigaciones
La investigación es un área que genera prestigio y hasta potencial de ingresos a la UPR. Sin embargo, los recortes al presupuesto ponen en riesgo la capacidad para continuarlas.
Aunque los fondos de fuentes externas son cruciales, el empuje inicial para estos proyectos proviene de la institución. “La investigación requiere mucho dinero y muchas veces el dinero (que da la universidad) no es suficiente así que los investigadores tienen que recurrir a someter propuestas para que les ayuden a financiar estas investigaciones. Sin embargo, cuando se está comenzando una investigación, para establecer esos resultados preliminares, tú no puedes someter una propuesta basada en la nada, tienes que demostrar que el proyecto es viable”, expresó la además exalumna de la UPR.
Desarrollo socioeconómico a través de investigaciones
La doctora Díaz planteó que para recibir fondos someten propuestas a programas como el Small Business Innovation Research Program, que muchas veces olfatean ideas que surgen en investigaciones de este tipo y que pueden terminar impactando vidas.
“En los laboratorios de investigación se generan muchas ideas y se desarrollan muchos trabajos que pueden llegar a la comunidad y ser de gran servicio. Hay agencias que tratan de que esas ideas que se desarrollan en los laboratorios se puedan convertir en un producto para la sociedad. Un ejemplo: Nosotros queremos crear este dispositivo que más tarde puede ser un producto que esté dispuesto para el alcance de los médicos y de las pacientes”, señaló la doctora.
Además, destacó que estas investigaciones permiten la búsqueda de la autosustentabilidad de los investigadores creando proyectos que pueden dar paso a desarrollo de microempresas que permitan una simbiosis entre la Universidad y la microempresa generando más oportunidades de desarrollo, crecimiento y empleo para estudiantes, profesionales de distintas áreas del saber”.
La doctora destacó que con la economía del conocimiento se viabiliza el desarrollo de investigaciones en beneficio del pueblo.
