A través de la historia, extensos estudios fueron dedicados a los cambios físicos que experimenta la madre durante el periodo de gestación de su bebé, limitando la aportación del padre a una genética. Sin embargo, en tiempos recientes, expertos encontraron que la paternidad es una experiencia igualmente transformadora a nivel emocional y físico para los hombres.
La psicóloga clínica, Mirelsa Modestti, explicó que los sentimientos que genera ser padre llevan a la emisión de hormonas de bienestar como dopamina o endorfinas, que provocan un cambio emocional y químico en el cuerpo del padre.
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“La importancia de las hormonas no es necesariamente la química, sino el efecto que tiene. En el momento que un padre abraza a su hijo por primera vez, todo lo que empieza a suceder en el cerebro genera un sentido de conexión, amor y protección”, dijo Modestti.
Un estudio publicado en la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, realizó resonancias magnéticas a múltiples padres y encontró que, durante los primeros cuatro meses después del parto, experimentaron un aumento de materia gris en áreas del cerebro relacionadas a la motivación parental y el vínculo emocional.
Para la investigadora de conducta humana, hasta hace unas décadas atrás al hombre se le mantenía alejado del proceso de gestación y parto, sin embargo, en los años 70 se comenzó a implementar en Puerto Rico el método psicoprofiláctico, que prepara a ambos padres para el nacimiento del bebé.
“Eso para mí es un momento clave en la historia de la paternidad porque hemos entrevistado decenas de hombres que dicen que su vida cambió desde ese momento que pudieron ver el nacimiento de sus hijos, y participar en el parto”, explicó la psicóloga.
Por otro lado, resaltó la importancia de retar las estructuras tradicionales de paternidad para ver al hombre más allá de un proveedor o el encargado de la aplicación de la disciplina.
“Estudios demuestran la importancia de involucrar la figura paterna en la crianza y en el desarrollo emocional y afectivo del niño. Ahora los roles son cada vez menos dirigidos por el género (…). Los dos padres tienen una importancia muy grande en modelar para sus hijos la manera de enfrentar situaciones y de proveer emocionalmente lo que va a necesitar para enfrentar la vida”, continuó Modestti.
Finalmente, la doctora apuntó que efectos psicológicos como la depresión posparto y el sentimiento de abandono también pueden ocurrir en los padres, y resaltó la importancia de buscar apoyo familiar o profesional a tiempo para evitar complicaciones.
