Para muchos, la afrodescendencia en Puerto Rico se festeja a fuerza de tambores para así evocar una de las tradiciones más antiguas de la cultura puertorriqueña: la bomba. Pero el bembé no culmina ahí ya que la costumbre incluye un pícaro intercambio entre un bailarín o bailarina y uno de los percusionistas en el que rememora los bailes que nos legó el continente africano. Para Hiram Abrante, sin duda alguna, la bomba es una de las huellas de la negritud en la cultura puertorriqueña.
“La negritud se refleja en la música, se refleja en todo, soy yo, es Loíza. Aunque yo siempre trato de que la gente entienda que la bomba no es solamente de Loíza, no es sólo de un sector, la bomba es puertorriqueña”, señaló Abrante, líder de la agrupación musical La Tribu de Abrante.
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Su colectivo musical mezcla la bomba con distintos ritmos contemporáneos. Precisamente, uno de los designios de La Tribu de Abrante es predicar la cultura afroboricua por toda la isla.
“Nosotros tenemos nuestros tambores, la forma de tocar, la forma de bailar, la forma de hacerlo y así se refleja y con tú solamente ver a La Tribu completa tenemos el reflejo entero de lo que es nuestra negritud”, dijo el intérprete.
“A las próximas generaciones lo único que quiero dejarles es el orgullo por nuestra patria, por nuestra música. Ese orgullo de lo que en realidad somos los puertorriqueños”, continuó.
