Poco antes del paso del huracán María, la diseñadora Stella Nolasco tuvo que salir de Puerto Rico para atender asuntos personales, sin sospechar que el impacto de la tormenta le impediría regresar y la llevarían a través de circunstancias que la mantuvieron fuera de la isla durante un año.
“No pude regresar a Puerto Rico hasta exactamente un año de haberme ido”, relató Nolasco en entrevista con Metro. Y qué regreso. La diseñadora presentó el sábado su nueva colección primavera-verano 2019, un proyecto en el que ha estado inmersa desde su llegada al terruño boricua a principios de agosto.
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“Esta colección es muy especial para mí porque la estoy haciendo desde mi atelier, que, como artista, es mi refugio, es mi hogar”, apuntó. El énfasis es más pertinente que nunca. El contexto que rodea a Stella para el desarrollo de cada una de las nuevas piezas contrasta mucho de la colección anterior, cuyo lanzamiento se vio tronchado, en principio, por el paso del huracán. Eso, sin embargo, no mermó las ganas de continuar.
“La colección se sacó con generadores eléctricos”, recordó mientras hablaba sobre cómo sus modistas, aún carentes de los servicios básicos, dieron la milla extra para continuar adelante con la colección. “Venían al taller. El edificio tenía generador eléctrico y, aunque se dañaba cada dos días y se detenía, era como un refugio para ellas y también mentalmente tenía un propósito”.
Desde Italia, Nolasco continuó adelante con los diseños y bocetos que, en Puerto Rico, su equipo de trabajo recibía por Internet con dificultad, debido a los incesantes problemas de comunicación que enfrentaba entonces la isla. En Roma, la diseñadora recibía las fotos de cada pieza.
“Ellas (las mo-distas) hacían el patrón; yo lo veía entallado: ‘No, bájenlo de aquí’, ya teníamos la técnica en la foto. Fue un reto”, relató. “Somos un familia y quedó comprobado a través de los años y, sobre todo, en este año pasado”.
La colección no se pudo presentar en octubre como estaba previsto, pero, finalmente, vio la luz en febrero en Nueva York, con un propósito mayor, a beneficio de la Fundación Artz Cure Sarcoma para ayudar a los afectados en la isla tras el paso de María.
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Para la nueva colección, Stella se ha encargado de acariciar con detalle desde el día uno cada pieza que será modelada mañana en El San Juan Hotel. “Agarré el maniquí y las telas, y muchos trajes van a ser hechos por mí, como cuando uno esculpe un traje”, afirmó. La colección es especial, además, porque se presentará en el lugar donde por vez primera desfiló una colección suya. De ahí que la nueva propuesta lleve por nombre Back To El San Juan Hotel.
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“Para mí regresar a Puerto Rico después de un año así y regresar al Hotel San Juan a tener un desfile donde yo comencé con mis desfiles, quedó perfecto. Es mi pequeña celebración, el comeback”, apuntó desde su atelier durante los pasados siete años en Santurce.
La nueva colección, que agrupa 40 cambios, define un estilo cocktail para primavera-verano. “Es una colección bien festiva, bien de celebración”.
“Estaba tan contenta de haber regresado a mi casa —literalmente a mi casa, porque se inundó y estaba fuera de mi casa—, que yo creo que puedes verlo en los colores y la ropa: es bien festiva, es como de celebración, es bien chic, de salir de noche y de fiesta. Lo que necesito. Extrañé mucho a Puerto Rico, a mis amistades”, expresó.
Entre las piezas destacan la presencia del metálico y las telas fluidas, que están muy de moda. También los escotes en la espalda, “que creo que, por mucho tiempo en mis comienzos, marcaba mi estilo siempre, y aquí vas a ver muchas espaldas interesantes que diseñé utilizando el estilo de drapeado en el maniquí, porque extrañaba el maniquí”, reiteró.