En el mundo del cabello, muchos son los mitos que se han regado sobre las cosas que son malas, incluso prohibidas, para tu pelo pero algunas de ellas no son ciertas.
Acá te ayudamos a desmentir esas afirmaciones para que seas libre de cuidar tu cabello como te plazca:
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1.- ¿El amoniaco es malo? Esta es una sustancia que se usa en coloraciones desde hace 50 años pero le han dado una mala fama de que puede dañar tu cabello pero no es así. El amoniaco cumple la función de ayudar en la coloración y después se evapora, por esa razón lo podemos oler. No permanece en el cabello.
2.- Sulfatos: cuando comenzó el boom de los alisados con queratina, esos conservantes agregados en las espumas se hicieron también de mala fama pero en realidad son inofensivos.
3.- Alcohol en el cabello: siempre se dijo que este líquido reseca el cabello, cosa que no es cierta. Es un compuesto orgánico y volátil que se evapora muy rápidamente por lo que no tiene tiempo suficiente para penetrar en el pelo.
4.- La silicona: varios estudios han confirmado que es seguro utilizar silicona en los productos del cabello y tiene varias propiedades beneficiosas, aunque algunos ecologistas prefieran que no se utilice pero ya eso es otro tema.
5.- Los parabenos: El doctor Conde-Salazar, jefe de Dermatología del Hospital Carlos III de Madrid, deja bien claro que los parabenos no son peligrosos: “Los parabenos son unos sensibilizantes débiles, y solamente pieles sometidas a una aplicación repetida de múltiples alergenos tendrían un umbral lo suficientemente bajo como para sufrir una reacción”.
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6.- La frecuencia de lavado: acá no hay una regla, cada persona se lava su cabello según lo necesite o quiera. Puede depender de su tipo de cabello: ya sea un lavado diario, cada tres días, semanal, lo primordial es utilizar el champú adecuado.
7.- La zona T: es una zona que tiene mayor concentración de grasa, como el cuero cabelludo y las raíces, esto es necesario para proteger el cabello por lo que un pelo graso no es algo malo.