Es un problema que nuestros antepasados no tenían, pero que en los tiempos modernos ha llevado a muchas más personas al cirujano plástico para buscar ayuda con un particular complejo.
De hecho, más de la mitad de los especialistas en este campo recibieron el año pasado consultas de pacientes que querían achicar su nariz, sólo por la horrible forma en que se veía en sus selfies.
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Un indicio que llamó la atención de un grupo de investigadores de la Academia Estadounidense de Cirugía Facial que descubrieron como el “efecto selfie” afecta el tamaño de la nariz de las personas.
El artículo resultado de la investigación, publicado en la revista JAMA Facial Plastic Surgery, detalla que en una autofoto tomada a 30 centímetros de distancia la nariz se distorsiona significativamente.
A dicha distancia, la nariz de las mujeres se ve un 29% más ancha, mientras que la de los hombre lo hace en un 30%.
La investigación, que creó varios modelos de cabezas humanas, logró determinar que la distorsión se produce debido a la “distorsión de perspectiva” de los lentes en las cámaras de los smartphones.
Estos aparatos poseen lentes de distancia focal simulase a un gran angular, es decir, hacen que los objetos más cerca de la cámara se vena más grandes.
Por eso es que la nariz pareciera crecer en las fotos. Por este motivo, los investigadores recomiendan hacer fotos en picado -o sea, con la cámara apuntando hacia abajo- para evitar una consulta y una operación innecesaria con el cirujano.
