Jennifer Lopez está más emocional que nunca, con el cumpleaños número 13 de sus mellizos Emme y Max: sus ’coconuts’, como les llama cariñosamente, han crecido velozmente en los últimos años y ya son todos unos adolescentes.
En su perfil de Instagram, la diva del Bronx compartió un video desde la cama de sus hijos, después de llevarles el desayuno junto con una carta, en la que probablemente le reafirma a sus hijos lo mucho que los ama y lo feliz que está de tenerlos en su vida cada día.
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Los hijos de Jennifer Lopez cumplen 13 años y así ha sido su transformación
Mientras tanto, con el texto que acompañó el video, que rápidamente superó el millón de reproducciones, enterneció a sus fans: “¡¡DIOS MÍO!! No puedo creer que hayan pasado 13 años desde que los llevé a los dos a casa en mis brazos en medio de una tormenta de nieve. De esa ventisca salieron dos coconuts perfectos que reorganizaron mi vida y me enseñaron el verdadero significado del amor. Ha sido el viaje más mágico lleno de aventura y alegría desde entonces”.
Y continuó en el mensaje diciendo: “Estoy sintiendo tantas emociones esta mañana… tan emocionada hoy… tan orgullosa y feliz y con el corazón roto porque no puedo congelar el tiempo. A mis dos almas cariñosas, sensibles y especiales… que sé que cambiarán y reorganizarán el mundo de una manera única… su mamá los ama más allá de la eternidad”, enfatizó.
Cuánto han crecido los mellizos de Jennifer Lopez
En redes sociales, comenzaron a circular fotos que reflejaban la gran transformación que han tenido los hijos de Jennifer Lopez en los últimos años: pasaron de ser unos adorables bebés a unos adolescentes llenos de brillo y de talento, heredado de sus padres.
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A lo largo de su carrera, la intérprete de El anillo ha dejado claro que la prioridad son sus hijos, y cada vez que viaja por trabajo siempre los lleva con ella, así ha estado muy atenta y presente en cada etapa de vida de sus pequeños.
Incluso, cuando los llevaba a las alfombras rojas por algún estreno de una película, hasta combinaba sus atuendos con los de sus hijos: en este caso, Max llevaba un traje del mismo tono del vestido de su famosa mamá.
Hoy en día, el estilo de ambos adolescentes ha cambiado mucho, mostrándose siempre cómodos y sencillos, con atuendos para nada ostentosos, confirmando que su mamá los ha criado enseñándoles que el lujo no es lo más importante.