Luis Miranda es figura recurrente en el quehacer social del Puerto Rico pos-Maria, en gran medida con la puesta en escena del galardonado musical Hamilton, uno de los temas principales del documental Siempre, Luis que estrenó esta semana en HBO y HBO MAX y que relata la vida de un emigrante que salió “temporeramente” de Puerto Rico hacia Nueva York, tras el sueño americano.
Miranda mejor conocido por ser el papá del dramaturgo, actor y compositor Lin Manuel Miranda, se encarga de guiarnos por su jornada de vida desde que se criaba en Vega Alta hasta convertirse en una pieza fundamental para la comunidad hispana en la ciudad de Nueva York de los ‘70 y ’80, trabajando como estratega de campañas políticas y persiguiendo el voto latino para el Partido Demócrata, funciones que al día de hoy ejerce.
El documental se beneficia de la narración del propio Miranda emulando la estructura del reciente proyecto de Netflix, Mucho Mucho Amor: The Legend of Walter Mercado, al ser quien cuenta su historia a través de entrevistas intercaladas con comentarios de familiares, figuras políticas y amigos.
La ópera prima del director John James, quien por tres años siguió los pasos de la figura central se puede analizar en dos partes, concentrándose el primer segmento brevemente en su vida en Puerto Rico y su llegada a Nueva York donde termina trabajando para la comunidad hispana y haciendo campaña para políticos como Hillary Clinton y Ed Koch, mientras cumplía con sus deberes familiares. El documental se adentra en la vida de Miranda incluyendo entrevistas con sus hermanos e hijos quienes le describen como un ser de inagotable energía. Y una segunda parte enfocada en los esfuerzos de los Miranda por traer Hamilton a Puerto Rico como señal de apoyo a la isla luego del huracán Maria, segmento que se desarrolla como una carrera contra el reloj, añadiendo tensión al ritmo. Indudablemente, el documental presenta de forma amena, la historia de un incansable individuo que logra balance en su vida.
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