Nueva York – El director editorial de la revista Bon Appetit, Adam Rapoport, renunció tras publicarse en redes sociales una fotografía en la que se le ve con un disfraz estereotípico puertorriqueño.
Empleados de la revista lo criticaron luego que la foto donde salen él y su esposa circuló en Twitter. Ese tuit tenía una captura de pantalla de una foto subida en 2003 a Instagram donde se ven los dos disfrazados. En la captura de pantalla, la esposa escribió el hashtag “boricua” y le decía “papi” a Rapoport. Él lucía en el cuello una pesada cadena, un pañuelo para el cabello y una gorra de béisbol. La cuenta de la esposa es privada.
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En un mensaje en Instagram, Rapoport dijo que renunciaba como director editorial para “reflexionar sobre el trabajo que tengo que hacer como ser humano”. Agregó que la foto fue de un disfraz de Halloween “extremamente mal pensado” hace 16 años. Reconoció “puntos ciegos” como editor y dijo que el personal y los lectores de la revista merecen mejor liderazgo.
El furor por la foto desató otras quejas de empleados. Sohla El-Waylly dijo en Instagram que no se le ha pagado por su participación en videos para el popular canal de Bon Appetit en YouTube, en contraste con empleados que hicieron lo mismo. La colaboradora pidió la renuncia de Rapoport y que los empleados de color reciban “títulos justos, salarios justos y compensación por presentaciones en video”. Recibió el respaldo en internet de varios de sus colegas. Al menos cuatro dijeron que no se presentarían en videos hasta que sus colegas de color recibiesen igual paga.
Condé Nast, editor de la revista, no respondió directamente al asunto. Pero dijo en un comunicado que está “dedicado a crear un lugar de trabajo diverso, inclusivo y equitativo”.
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Varios miembros del personal de Bon Appetit, incluyendo El-Waylly, son estrellas de YouTube. Dedicados fanáticos consumen videos de ellos preparando platillos, a veces junto con celebridades, recreando clásicos de comida chatarra, en la cocina de pruebas de la revista y charlando sobre comida, la prensa de comida y otros temas.
Bon Appetit ha estado tratando de aprovechar un impulso nacional, diciendo recientemente que va a resaltar más negocios de propietarios negros y “abordar más de los asuntos raciales y políticos en el centro del mundo de la comida”.
Las compañías de medios enfrentan su momento de reflexión sobre el racismo ahora que las protestas contra la violencia policial contra la población negra se extienden por todo Estados Unidos, desatando una conversación más amplia sobre asuntos de raza.
Reporteros, redactores y otros trabajadores de los medios, especialmente personas de color, están hablando sobre contenido y políticas racistas en sus publicaciones. El director de la página editorial del New York Times, James Bennet, renunció el domingo tras la publicación de un artículo de opinión del senador republicano Tom Cotton que promovió el uso de las fuerzas armadas contra la agitación pública. Eso siguió a una revuelta de muchos empleados en el Times, muchos de los cuales dijeron que la publicación del artículo de Cotton ponía en peligro la vida de los empleados negros del periódico.
El editor principal del Philadelphia Inquirer renunció el sábado luego que empleados del periódico criticaron el uso de un titular que decía “Buildings Matter, Too”, en una columna sobre daños a edificios durante protestas. Fue un juego de palabras sobre el movimiento Black Lives Matter que el diario admitió fue “ofensivo e inapropiado”.
Colegas de una reportera negra del Pittsburgh Post-Gazette le expresaron su respaldo luego que el periódico le dijo que ella no podía cubrir las protestas contra violencia policial porque estaba prejuiciada.
También el lunes, Christene Barberich, fundadora y directora editorial de Refinery29, un portal propiedad de Vice y dirigido a las mujeres, dijo que ella también iba a renunciar tras ver “las cuentas personales francas de mujeres negras y mujeres de color sobre sus experiencias” en la compañía. Varias exempleadas colocaron mensajes en redes sociales sobre el racismo que han sufrido, incluyendo disparidades salariales.
En un memo al personal, la directora general de Vice, Nancy Dubuc, dijo que la compañía comenzará una reforma sistemática y amplia de “la forma en que contratamos, desarrollamos y retenemos una fuerza laboral globalmente diversa”. Barberich seguirá en la compañía durante “un período de transición”, indicó Dubuc.
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