Shakira tarareó en varias ocasiones fragmentos de su canción “La bicicleta”, en un tribunal español, para defenderse de la acusación de plagio que pesa en su contra.
La cantante y Carlos Vives se presentaron ante un tribunal de comercio en Madrid este miércoles, en donde negaron que su famoso tema sea un plagio de la canción “Yo te quiero tanto” del cubano Livam.
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“No tiene nada de parecido ni en la melodía, ni en la armonía, ni en la temática” con la canción cubana, insistió la colombiana, que en varias ocasiones tarareó fragmentos del tema durante su declaración.
Liván Rafael Castellano y su discográfica MDRB Music Publishing denunciaron que “La bicicleta”, ganadora del Grammy Latino 2016 a la mejor canción, es un plagio de una canción suya de 1997.
Tanto Shakira como Vives aseguraron que desconocían la canción y tampoco sabían de Livam.
“No la había oído nunca en mi vida”, aseguró algo nerviosa la cantante. “No conocía a Livam”, corroboró Carlos Vives, quien compuso la melodía y gran parte de la letra de la canción, con la ayuda del productor Andrés Castro, quien también está denunciado junto a Sony Music.
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Durante el juicio, aseguró que el productor Andrés Castro tuvo acceso a su canción a través de un representante suyo.
“Es como un hijo mío que me estén tocando (…) Me están robando”, aseguró al borde de las lágrimas.
El cantante reclama al tribunal que se le reconozcan los derechos de autor de lo que considera un plagio, y señaló a AFP que afronta el juicio “con tranquilidad”.
La principal similitud se encuentra en el estribillo: en “La bicicleta” los colombianos cantan “que te sueño y que te quiero tanto”, mientras que Livam entona “yo te quiero, yo te quiero tanto”.
Asimismo, el tema es un vallenato y homenaje a Colombia, mientras que la otra es una “salsa dominicana” que “intenta ser un vallenato”; en definitiva, “un arroz con mango”, agregó la novia de Piqué.
Shak explicó que en “La bicicleta” no participó en la composición de la melodía, obra de Carlos Vives, sino solo en la redacción de la letra de uno de los dos estribillos, que tiene como fondo una música de acordeón.
La cantante de 42 años, que vive actualmente en Barcelona con el futbolista y sus dos hijos, deberá pasar nuevamente por los juzgados en junio para declarar como investigada por un presunto fraude fiscal de 14,5 millones de euros.
Con información de Infobae-Agencias