Luego de la boda siempre viene la luna de miel, o casi siempre ya que Meghan Markle y el príncipe Harry decidieron anteponer sus compromisos reales antes del placer. Pero esto no significa que la cancelaron, es más, este lunes se supo cual sería el destino de la pareja de “tortolitos”.
Si bien en un principio se especulaba con un viaje a África, los duques de Sussex nos han sorprendido una vez más y optaron por un viaje totalmente diferente al que pensábamos.
Aunque resulte increíble, debido a lo poco exótico, la pareja se inclinó por pasar su luna de miel en una romántica cabaña en Canadá, país donde residía Meghan cuando era actriz de la serie Suits.
El lugar seleccionado es la Cabaña Outlook de Fairmont Jasper Park Lodge de Alberta, situado dentro de Parque Nacional de Jasper, según revela TMZ.
Destino royal
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Pero no es una casa de campo cualquiera, es la llamada “The Royal Retreat” (“El retiro real”), apodo recibido por ser uno de los lugares de descanso favoritos de la monarquía inglesa.
Quizá a Harry el destino se lo recomendó su abuela, la reina Isabel II, quien también pasó en la cabaña de seis mil pies cuadrados un par de veladas con el príncipe Felipe en 2005. Pero no fueron los únicos, ya que sus mismísimos bisabuelos, el rey Jorge VI y la reina madre Isabel, se alojaron ahí 1939, reseña el sitio oficial de Fairmont Jasper Park Lodge.