El clásico de Eric Clapton “Tears in Heaven” sirvió el domingo en los Grammy para honrar la memoria de las víctimas del tiroteo más mortífero en la historia reciente de Estados Unidos, ocurrido en un festival de música en Las Vegas, y de otro ataque ocurrido en un concierto en Manchester.
Los artistas country Eric Church, Maren Morris y Brothers Osborne, quienes se presentaron en el festival Route 91 Harvest en el que ocurrió el tiroteo en octubre de 2017, interpretaron la conmovedora canción mientras aparecían los nombres de las víctimas tras ellos en el escenario.
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“A toda la música country le recordaron de la forma más trágica la conexión que compartimos con los fans y el amoroso poder que siempre proporcionará la música”, dijo Church con un nudo en la garganta.
Los artistas también rindieron homenaje con la canción a las víctimas del ataque con explosivos fuera del concierto de Ariana Grande en Manchester, Inglaterra, ocurrido en mayo.
“Tears in Heaven”, que ganó tres Grammy en 1993 incluyendo canción y grabación del año, fue compuesta por Clapton en honor a su hijo de cuatro años fallecido en 1991 tras caer de una ventana en un edificio.
El homenaje fue realizado con la voz de barítono de TJ Osborne, el toque tejano de Morris y la poderosa voz de Church, aunque un problema con el micrófono hizo que la voz de Morris no se entendiera al comienzo de la pieza.
“La dolorosa verdad es que este año en esos dos eventos 81 amantes de la música, como nosotros, que fueron a disfrutar una noche de música, nunca regresaron a casa”, dijo Morris.
