La Junta de Planificación, en reunión de junta en pleno, designó como sitios históricos el antiguo edificio Suliveres, en Arecibo, el antiguo Pueblo del Niño, en Dorado, y las ruinas de la hacienda La Lucía, en Yabucoa.
El presidente de la Junta, Luis García Pelatti, indicó que “estas designaciones representan un gran valor histórico para el pueblo de Puerto Rico, por su arquitectura, su cultura y su arqueología”.
Añadió que además contribuyen a fomentar el turismo.
El edificio Suliveres está ubicado en el 65 de la calle Gonzalo Marín (bloque circundante a la Plaza de Recreo), en el barrio Pueblo, en Arecibo. Fue construido entre 1895 y 1910 y es una estructura en madera y hormigón, techada en cinc. Fue restaurado en 2007.
Está compuesto por dos locales comerciales y cuatro apartamentos. Los interiores de los apartamentos conservan sus terminaciones originales en plafones (calados, cornisas, retalles) y paredes.
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Además, es de escala monumental, con carácter casi institucional, evocando una arquitectura clasicista al estilo del novecentismo español, movimiento estético inicialmente artístico y literario, pero extendido a otros ámbitos de la cultura de comienzos del siglo XX.
El antiguo Pueblo del Niño, declarado Monumento Histórico Nacional, se ubica en la carretera PR-693, kilómetro 8.2 del barrio Higuillar, en Dorado.
Está formado por tres edificios que albergaban el Pueblo del Niño, que integra uno escolar, que actualmente se conoce como el edificio de “Artes y Ciencias”, compuesto por un dormitorio y una antigua capilla.
Fue concebido como una obra de gobierno con la función social de dar techo y abrigo a niños a quienes la vida les arrebató el amor de sus padres, dejándolos en la orfandad.
El diseño de la estructura fue obra del arquitecto Rafael Carmoega, quien para ese entonces fungía como arquitecto del Estado.
Las ruinas de la antigua hacienda La Lucía están localizadas en el barrio Camino Nuevo, cerca de la carretera PR-901 y parte de la ruta panorámica Luis Muñoz Marín. El terreno comprende la delimitación original de La Lucía y todas las estructuras y maquinaria que se encuentren dentro de las ruinas.
Fue establecida originalmente en 1852 por el emigrante francés Gustave Dansau. En 1883, los hermanos Lavergne, emparentados en matrimonio con monsier Dansau, montaron el molino de vapor cuyas ruinas se observan hoy en día.
Al presente, el lugar contiene un fragmento no techado de una estructura de mampostería. Además, alberga la maquinaria remanente de un trapiche de vapor de pistón horizontal hecho por la firma W. & A. McOnie de Glasgow, Escocia, Gran Bretaña, en 1883.
Las ruinas son el único vestigio que ha sobrevivido los embates del tiempo. Por otra parte, es considerado por los historiadores, urbanistas e ingenieros una pieza importante para lograr el proceso de reconstrucción económica del municipio y representa otro de los lugares emblemáticos más significativos que le queda al pueblo de Yabucoa.
Igualmente, se designaron como sitios históricos la Residencia García de Quevedo, en Añasco, y la Escuela de la Comunidad Negroni, en Yauco.
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