La belga Kim Clijsters, tetracampeona de Grand Slam, canceló el viernes su participación en el torneo Western & Southern Open por una lesión abdominal de la que desea recuperarse antes del inicio del U.S. Open.
La tenista de 37 años de antemano es integrante del Salón de la Fama del Tenis Internacional y este año regresó de su retiro.
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El U.S. Open, que arranca el 31 de agosto, sería su primer torneo de Grand Slam desde que compitió en Flushing Meadows en 2012, siendo eliminada en la segunda ronda.
El Western & Southern Open inicia el sábado en Nueva York, en la misma sede del U.S. Open. El torneo en cancha dura, que normalmente sirve de preparación para el Abierto de Estados Unidos, se lleva a cabo en Cincinnati pero este año se mudó a Nueva York a raíz de la pandemia del coronavirus.
“Tengo grandes recuerdos de jugar en Cincinnati y estaba emocionada por ser parte del evento este año”, dijo Clijsters. “Es decepcionante tener que abandonar, pero después de platicarlo con médicos y mi equipo, necesito un poco más de tiempo para recuperarme”.
Clijsters indicó que permanecerá en la “burbuja” creada por la Asociación de Tenis de Estados Unidos (USTA, por sus siglas en inglés) para los dos torneos y “continuaré mi preparación con mi equipo”.
La belga llegó a ser la número uno del mundo y ganó los títulos en sencillos del U.S. Open en 2005, 2009 y 2010, así como otro trofeo de Grand Slam en sencillos en el Abierto de Australia en 2011.
Clijsters recibió tarjetas de invitación de parte de la USTA tanto para sencillos como en dobles para el U.S. Open.