En momentos en que el coronavirus había dejado inactivos a seis equipos de las Grandes Ligas, el comisionado Rob Manfred habló el viernes con el líder del sindicato de peloteros Tony Clark, sobre la importancia de que los jugadores sigan los protocolos para evitar el contagio.
Manfred y Clark hablaron de lo que debe hacerse para completar la temporada, dijo una persona cercana a la conversación, quien habló con The Associated Press a condición de permanecer anónima por la índole delicada de la situación.
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La conversación entre Manfre y Clark, reportada originalmente por ESPN, llega en medio de evidencias crecientes de que la propagación del COVID-19 amenaza con rebasar los esfuerzos por llevar a cabo la temporada de béisbol.
“Algunas cosas no están bien ahora, pero tenemos que seguir jugando hasta que lo estén. Los jugadores están viendo lo que puede ocurrir”, dijo el manager de Houston, Dusty Baker. “Lo demás depende de nosotros y del virus”.
Han surgido muestras de preocupación acerca de una conducta laxa por parte de los peloteros en el terreno y fuera de éste. Algunos han escupido y otros han intercambiado palmadas.
Y las alteraciones constantes en el calendario han generado mayores dudas sobre si el deseo de los dueños de los equipos por sacar adelante la temporada puede cumplirse en la realidad.
“Obviamente vimos el mensaje. Ellos enviaron un memo. Simplemente hay que ser más diligentes, usar la mascarilla en el dugout cundo no estamos jugando y seguir las reglas que hemos conocido todo el tiempo”, dijo el cátcher de Arizona, Stephen Vogt “Así que esto es como cualquier otra regla que tengan las Grandes Ligas para los jugadores. Hay que cumplirla. Simplemente nos han exhortado en términos firmes”.
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La propagación del coronavirus causó otro ajuste en el calendario de Grandes Ligas durante la jornada.
El encuentro del viernes entre San Luis y Milwaukee fue pospuesto después de que dos jugadores de los Cardenales dieron positivo de coronavirus.
“Sugiéranme por favor un programa de TV”, tuiteó Jack Flaherty, lanzador de los Cardenales, quien figura entre un número creciente de peloteros que de pronto se han encontrado con tiempo libre ante la cancelación de sus encuentros.
En un comunicado, los Cardenales indicaron que se habían enterado el jueves por la noche sobre las pruebas positivas de muestras recolectadas el miércoles. A jugadores y empleados se les ha ordenado que se aíslen en sus habitaciones de hotel en Milwaukee, y el equipo no salió del hotel el viernes rumbo al Miller Park.
“El equipo actualmente realiza pruebas rápidas a todo el grupo de personas que realizó el viaje, ha implementado rastreo y continuará en autoaislamiento”, detalló el equipo de San Luis.
Los Cerveceros y los Cardenales planeaban reanudar sus compromisos este sábado por la noche en el Miller Park, dependiendo de los resultados de las pruebas y del rastreo de contactos, y jugarían el partido pendiente como parte de una doble cartelera el domingo. Un cambio de regla recién aprobado, contempla que los juegos de una doble cartelera sean de sólo siete entradas.
Mark Attanasio, dueño mayoritario de los Cerveceros, dijo que las Grandes Ligas están preparadas par imprevistos, particularmente en este año.
“Creo que todos estamos comprometidos a finalizar la temporada, y he hablado hoy con muchos jugadores”, dijo Attanasio. “Mientras podamos seguir haciendo que nuestros fanáticos disfruten, pienso que esto es algo que todos queremos hacer… Si no somos inteligentes y no nos mantenemos saludables, todos fallamos. Pero vamos a hacer todo lo que podamos para no fallar”.
Dos series del fin de semana, la de Washington ante Miami y Toronto frente a Filadelfia, se habían aplazado de antemano. Los Marlins fueron afectados por un brote de coronavirus en Filadelfia, que infectó al menos a 20 miembros del equipo.
Miami y los Filis permanecerán inactivos durante al menos una semana.
Los calendarios de los Yanquis de Nueva York y de los Orioles de Baltimore fueron afectados también, cuando había transcurrido apenas una semana de una campaña que comenzó con cuatro meses de demora y que debió abreviarse por la pandemia. Ahora, la temporada parece en jaque.
“Esto es algo que me preocupa”, reconoció Charlie Blackmon, jardinero de los Rockies de Colorado, quien se había perdido ya actividad por el virus. “Hablo por todo el equipo de los Rockies. Queremos jugar… Cualquier cosa negativa que surja en términos de esta situación con el virus podría ser un obstáculo. Así que sí, me preocupa y preferiría no ver más casos positivos”.
Los seis equipos que estaban inactivos el viernes representaban el 20% del total que conforma las Grandes Ligas.
“No creo que una sola persona hubiera pensado que todo esto iba a ser perfecto”, recalcó el gerente general de los Azulejos, Ross Atkins. “Estamos tan seguro como podemos, pero entendemos que este virus es muy fuerte y no tiene fronteras”.
En la semana que concluyó el jueves, las Grandes Ligas informaron que hubo 29 casos positivos, un índice de 0,2% respecto del total de pruebas. Además de los Marlins, surgieron ocho casos positivos en los otros 29 equipos. Sólo dos de éstos involucraron a peloteros de las mayores.
Los Cardenales jugaron en Minnesota el martes y miércoles antes de un día de descanso programado para el jueves. Los Mellizos recibieron a Cleveland la noche del jueves, y los Indios hicieron uso de los mismos vestuarios para el equipo visitante que San Luis.
Los Marlins no han jugado desde el domingo ante la propagación de la enfermedad.
El viernes trascendió que otro pelotero de los Marlins dio positivo por el coronavirus, con lo que el total de casos por el brote en el equipo ascendió a 18 jugadores y dos empleados más, de acuerdo con una persona enterada de la situación.
La persona, que habló con The Associated Press a condición de mantener el anonimato dado a que la información no ha sido anunciada de manera oficial, subrayó que ningún integrante de los Marlins ha mostrado síntomas graves.
Con ello, ya son ocho de los 30 equipos de Grandes Ligas los que han sufrido alteraciones en sus planes durante los primeros nueve de los 67 días de la temporada.
Por su parte, los Azulejos están fuera de casa debido a que el gobierno de Canadá no les autorizó utilizar su estadio esta temporada ante los riesgos que acarrean los constantes viajes desde Estados Unidos.