Con 35 años encima, Cristiano Ronaldo está teniendo dificultades para recuperar su famosa explosividad después de tres meses sin jugar por la pandemia de coronavirus.
El delantero de la Juventus gravitó poco en los dos primeros partidos de la reanudación del fútbol en Italia. Su racha de 19 goles en 14 partidos consecutivos antes de la suspensión parecen un recuerdo lejano.
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“En este momento sus registros (con respecto a su condición física) no son malos, quizá los mejores de la temporada, lo que quiere decir que entrenó mucho (durante el confinamiento)”, dijo el técnico de la Juventus Maurizio Sarri después de que su equipo sucumbió ante el Napoli por penales en la final de la Copa Italia tras empatar 0-0 el miércoles.
“En cuanto a su aceleración y velocidad máxima, sus números no son a lo que estamos acostumbrados, pero eso es normal para alguien que no ha estado jugando”, añadió,
La semana pasada, en la semifinal ante el Milan, el astro portugués prácticamente desapareció tras fallar un penal en la primera mitad.
Frente al Napoli, el aporte del cinco veces ganador del Balón de Oro fue escaso.
Ronaldo provocó un tiro de esquina tras una serie de sus característicos amagues y su única ocasión en el partido fue bien repelida por el arquero rival Alex Meret.
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Lo peor se dio en la tanda de penales. Fue un mero testigo, observando con desesperación cuando el Napoli aseguró el triunfo por 4-2, sin poder ejecutar el último remate para la Juve.
En la ceremonia de premiación, Cristiano a duras penas contuvo el llanto.
El partido se jugó en el día que su hijo Cristiano Jr. cumplió 10 años. También se le escapó la oportunidad de sumar el 30mo trofeo de su carrera.
Se suponía que este iba a ser el mes en el que Cristiano comandaría a Portugal en la defensa del título de la Eurocopa. En cambio, tendrá que apurar la puesta a punto al reanudarse la Serie A.
Los otros delanteros de la Juve también necesitan ponerse las pilas.
El argentino Paulo Dybala apenas mostró algunos chispazos tras dar positivo de COVID-19 durante 50 días. Su fallo en el primer penal marcó el rumbo de la tanda.
Su compatriota Gonzalo Higuaín se perdió los compromisos de la copa tras sufrir una lesión muscular al reincorporarse a los entrenamientos. Y el brasileño Douglas Costa también padece lesiones.
“Todos son jugadores acostumbrados a resolver situaciones por sus propios medios”, dijo Sarri. “Ahora mismo no podemos esperar más al considerar la condición física”.
NAPOLI REMONTA
En seis meses, el entrenador del Napoli Gennaro Gattuso logró lo que Sarri no pudo en las tres temporadas con el equipo sureño: ganar un título.
Napoli estaba en crisis cuando contrataron a Gattuso para reemplazar al despedido Carlo Ancelotti en diciembre. Pero al infundir la misma garra con la que se hizo famoso como mediocampista del Milan y con Italia, Gattuso ha guiado al Nápoles a dos triunfos ante la Juve, así como victorias ante la Lazio y el Inter de Milán —los contendientes al título de la Serie A.
“Es algo grande”, dijo Gattuso. “Me pongo todo el peso encima pues a veces me siento como el dueño del equipo, algunas veces como aquel que se encarga del equipamiento y a veces como el médico”.
TELEVISIÓN VIRTUAL
Con una final de la Copa disputándose en un estadio vacío, la cadena nacional RAI ensayó una experiencia virtual para los aficionados que vieron el partido en casa.
Las gradas vacías fueron cubiertas con imágenes electrónicas sobre la tribuna que tiene el color del patrocinador Coca-Cola. Los extremos del estadio fueron puntados con los colores de los equipos —blanco y negro de la Juventus y azul del Napoli.
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