Un grupo de criadores de caballos, así como ciudadanos y aficionados, solicitaron el viernes a la gobernadora, Wanda Vázquez Garced que autorice la reapertura de las carreras de caballo a la mayor brevedad posible.
“En otras jurisdicciones de los Estados Unidos nunca se detuvo la actividad hípica, mientras que en otros estados como Florida y Oklahoma se están moviendo hacia esa reapertura en los próximos días. Eso pedimos nosotros, que se permita las carreras de caballo sin fanáticos, para así evitar la muerte de esta venerable e histórica industria en nuestra nada isla”, señaló en declaraciones escritas, Eduardo Maldonado, presidente la Asociación de Criadores de Caballos Purasangre de Puerto Rico.
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Indicó que enviaron una carta dirigida al director ejecutivo de la Comisión de Juegos de Puerto Rico, José Maymo, en la que solicitaron su apoyo para que el gobierno apruebe el plan de reapertura sometido recientemente por la empresa operadora del Hipódromo El Camarero Reacetrack en el que establece con detalles las medidas de seguridad a tomarse para salvaguardar los trabajadores de la facilidad y la industria.
Según datos disponibles, el hipismo puertorriqueño es fuente directa de empleo para unas 4,000 personas. Entre 3,000 y 8,000 ciudadanos adicionales son empleados por la industria de manera indirecta. Estos se encuentran distribuidos entre trabajadores adscritos al hipódromo Camarero, agencias hípicas, fincas dedicadas a la crianza de caballos, servicios veterinario, jinetes, entrenadores, domadores, mozos de cuadra, herradores, agricultores, artesanos, estilistas equinos, terapistas físicos, transportistas, entre otros.
“De lo que estamos hablando aquí son de empleos que se podrían perder para siempre. Miles de familias dependen de este deporte y mientras más pase el tiempo, más difícil se hará recuperarnos, si sucediera. Muchos de los sobre 50 criadores de caballos tampoco sobrevivirán. Es imperativo reactivar esa industria, una que, por su particularidad, se puede reiniciar con mínimo riesgo y bajo estrictas medidas de salud y seguridad. En la reapertura quizás podamos observar un resurgimiento de esta industria agobiada por bajas en los niveles de apuestas y la necesidad de modernización. En los estados, la actividad hípica ha ayudado a la economía y eso puede pasar aquí en Puerto Rico”, agregó Maldonado.
Señaló que estados como Nueva York y California, cumpliendo con las normas de distanciamiento social, continúan escenificando carreras de caballos durante la pandemia de coronavirus.
Por su parte, un grupo de aficionados, encabezados por Hiram Torres, Juan Pérez y Ángel Luis González, recalcaron la importancia de empezar esta actividad hípica este mismo mes de mayo.
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