El béisbol de Little League regresa a las comunidades devastadas por los huracanes que recientemente afectaron a Puerto Rico.
El ícono musical Marc Anthony y el jugador estelar de béisbol de los Chicago Cubs, Javier Báez, se unieron a funcionarios y familias locales para celebrar la restauración de los campos de béisbol en el Parque de la Comunidad La Ceiba en Loíza, que fueron destruídos por los huracanes que devastaron gran parte de la isla en 2017.
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Este proyecto es uno de los primeros bajo una nueva iniciativa llamada Play Ball Again, que tiene como objetivo restaurar alrededor de 25 campos deportivos e instalaciones relacionadas que servirán a 17,500 jóvenes en toda la isla.
“Hoy no sólo celebramos béisbol, también celebramos esas ganas de salir adelante que tiene Puerto Rico”, expresó Marc Anthony, mientras estaba reunido con miembros de la comunidad para apoyar el primer lanzamiento. “Con la reconstrucción de estos campos, podemos ayudar a las familias a dar un paso más allá del trauma de los últimos dos años hacia a un futuro más fuerte y saludable para nuestros niños y sus familias “.
La iniciativa Play Ball Again de $1.6 millones fue lanzada por la Corporación de Apoyo a las Iniciativas Locales (LISC, por sus siglas en inglés) a principios de este año como parte de un amplio esfuerzo para estimular la recuperación económica en toda la isla.
La Fundación Maestro Cares, que Anthony co-fundó en 2012, se une para este nuevo esfuerzo a la Fundación Good Bunny y UNICEF USA para financiar los primeros $300,000 destinados para la renovación de los campos. Cubs Charities hizo una aportación adicional al esfuerzo de $100,000 adicionales, y Kohler Company agregó su apoyo con accesorios de baño donados para las instalaciones.
“Dos años después de estas tormentas devastadoras, la necesidad de reconstruir la isla sigue fuerte”, dijo Báez, cuya familia es del área de Bayamón. “Cubs Charities entendió la necesidad y ha tomado la iniciativa para ayudar a restaurar los campos de béisbol y darles a los niños en todo Puerto Rico la oportunidad de jugar el deporte. Esta reconstrucción tendrá un impacto enorme en la comunidad, y me siento orgulloso de continuar con mis esfuerzos para restaurar la isla”.
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“Desde sus comienzos, Maestro Cares ha incorporado los campos de béisbol en nuestra construcción de hogares en toda América Latina”, añadió Henry Cárdenas, co-fundador de la organización. “Este proyecto nos permite aportar a la restauración de más campos deportivos en Puerto Rico y servirles a los niños en toda la isla”.
LISC anticipa que Play Ball Again restaurará otras dos docenas de campos durante el próximo año, incluyendo instalaciones en Vega Baja, Carolina, Yabucoa, Yauco, Utuado, Caguas y Casteñer, además de Loíza. Estas comunidades representan una porción geográfica diversa de Puerto Rico que abarca algunas de las mayores concentraciones de jugadores juveniles en zonas rurales y aquellos más afectados por los huracanes.
“Los campos, equipos y programas locales están en el fondo de la tradición de excelencia en el béisbol de Puerto Rico”, señaló el director regional de Little League Latin America, Carlos Pagán, quien estuvo en Loíza para celebrar los nuevos campos. “No sólo ayudan a crear grandes jugadores; ayudan a crear grandes personas “.
A través de Play Ball Again, LISC ha estado trabajando con una variedad de organizaciones y líderes comunitarios para delinear planes de redesarrollo para campos, incluyendo Little League Puerto Rico, PathStone Enterprise Center y All Hands and Hearts.
“Estas colaboraciones son parte de nuestro compromiso a largo plazo con Puerto Rico, uno enfocado en fortalecer una prosperidad ampliamente compartida y una buena calidad de vida tanto en áreas urbanas como rurales”, dijo Maurice A. Jones, presidente y director general de LISC. “No puedo imaginarme una mejor ilustración de esos objetivos, que los jóvenes jueguen en un campo de pelota, con entrenadores enseñando y liderando, los padres expresando su entusiasmo y una comunidad uniéndose para apoyarse mutuamente “.
“Después de tantos momentos difíciles, estos espacios traerán esperanza y unión a la juventud, para que puedan continuar soñando, creciendo y forjando un mejor futuro”, dijo Noah Assad, cofundador de la Fundación Good Bunny. “El objetivo de todo esto es restaurar la felicidad al pueblo puertorriqueño y apoyarlo en su crecimiento como sociedad”.
“Nos sentimos increíblemente agradecidos por el apoyo de nuestros socios como LISC, Maestro Cares y la Fundación Good Bunny, que comparten nuestra creencia de que jugar es el derecho de todos los niños”, dijo Anucha Browne, directora principal de compromiso, defensa y programas globales en UNICEF USA. “Al reconstruir estos campos, no sólo están ayudando a una comunidad que ha superado tanto en los últimos dos años, sino que también les da a los niños la oportunidad de jugar y de ser niños”.