Jared Goff no había pronunciado aún su primera palabra cuando Tom Brady era seleccionado en 1995 en la 18va ronda del draft por los Expos de Montreal, el equipo del béisbol de las Grandes Ligas con el que debutó su padre Jerry.
Tenía apenas seis años, la misma edad que la hija menor de Brady, cuando el quarterback de los Patriots ganó el primero de cinco Super Bowls en enero de 2002, precisamente contra los Rams. Y no había salido de la escuela primaria cuando su rival del próximo domingo celebraba su tercer campeonato.
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Hoy en día, los Expos ya no existen, los Rams ya no juegan en San Luis, Jared Goff es un quarterback de Pro Bowl y, bueno, Tom Brady sigue llevando a los Patriots a Super Bowls. Porque hay cosas que simplemente nunca cambian.
En aquel 2002, un joven Brady de 24 años sorprendía al mundo al derrotar a un consagrado Kurt Warner y guiar a los Patriots a firmar una de las mayores sorpresas en la historia del Super Bowl. En ese sentido, a los Rams solo les queda esperar que la historia se repita, con un pequeño giro.
Goff tiene la misma edad que Brady en aquel entonces. Los Patriots, al igual que aquel equipo de Kurt Warner, habían sido campeones tan solo dos temporadas atrás y los Rams han esperado todo este tiempo para cobrar su venganza.
La brecha generacional que divide a los protagonistas de la edición 53 del Super Bowl es inmensa. La diferencia de 17 años entre ambos quarterbacks sería difícil de detectar si se comparan sus números de la campaña regular. Hay otras cifras que, sin embargo, no son tan sutiles.
Tan solo en la postemporada, Brady, de 41 años tiene 29 victorias, 10,917 yardas y 73 pases de touchdowns, mientras que Goff acumula 26 triunfos, 20,323 yardas y 23 envíos de anotación en sus tres campañas como profesional.
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Goff, por un lado, no está aquí para hablar de certificados de nacimiento.
“Es un tremendo jugador y un tipo al que respeto mucho porque ha sido capaz de hacer esto durante muchos años”, dijo Goff, de 24 años. “Pero yo espero enfrentarme a la defensiva de los Patriots y estoy seguro que él ansía enfrentarse a la nuestra”.
Brady ha estado suficiente tiempo en la cima que él solo tiene más apariciones de Super Bowl que todo el roster de los Rams, supera en edad al coach de los Rams Sean McVay (33) y sigue sin perder un solo paso.
De hecho, promedió 267.5 yardas por juego en la postemporada antes de cumplir los 40 años de edad, esas son prácticamente 100 yardas menos que su promedio en los playoffs de los últimos dos años, ya con cuatro décadas cumplidas.
Eso incrementa el grado de dificultad para el responsable de intentar contenerlo, el coordinador defensivo de los Rams, Wade Phillips.
“Desafortunadamente para mí, yo envejezco pero Tom Brady no”, dijo el asistente de 71 años de edad. “No puedes detener a las grandes ofensivas, solo intentas contenerlas”.
Es más fácil decirlo que hacerlo cuando se trata de Brady, quien posee los récords de más inicios (8), triunfos (5), pases lanzados (357), pases completos (235), yardas (2.576) y envíos de touchdowns (18) en la historia del Super Bowl. Y el domingo va por más.
“Creo que la gente pensaría ‘tienes 41, ¿qué estás haciendo? Sigo persiguiendo mis sueños y haciendo lo que amo”.
Es decir, llegando a Super Bowls y acallando detractores, el Padre Tiempo incluido.