Rusia tuvo una cómoda faena en el inicio de su Mundial, al golear por 5-0 a un inocente e inexperto equipo de Arabia Saudita, que dirige el ex entrenador de la Roja, Juan Antonio Pizzi, que dejó mucho que desear en el Luzhiniki Stadium de Moscú.
Yuri Gazinsky (12’), Denis Cheryshev (43’ y 90’), Artem Dzyuba (71’) y Alexandr Golovin (93’) fueron los autores de los goles rusos, en un partido que no tuvo mucha historia, pero que demostró que el local es muy superior a los árabes, que mostraron muy poco para justificar su presencia en esta Copa del Mundo.
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El partido comenzó muy parejo, pero el gol de Gazinsky con un cabezazo, cambió las cosas, porque los de Pizzi evidenciaron sus falencias de todo tipo y los locales se soltaron poco a poco, con el apoyo de un estadio lleno y con la mirada de su Presidente Vladimir Putin.
Tras la lesión de Alan Dzagoev -el mejor de Rusia- en el primer tiempo, parecía que todo se complicaba, pero el que lo reemplazó (Cheryshev) hizo la gran diferencia sobre el final del primer lapso, marcando un golazo para el 2-0 que liquidó toda opción de los dirigidos por Macanudo.
Rusia completa la goleada
El segundo tiempo fue muy pobre, porque los euroasiáticos ya estaban conformes con su ventaja y Arabia no tenía ningún argumento para cambiar su historia en este partido. Por eso, no sorprendió el 3-0 marcado por Dzyuba, tras una buena jugada colectiva y sobre el final dos nuevos golazos de Cheryshev -de tres dedos- y luego Golovin con un tiro libre brillante.
Al final, Rusia sacó buena ventaja ante un rival muy mediocre y débil, y ahora sueña con meterse en octavos de final, aunque para eso deberá mostrar algo más ante Uruguay y Egipto, los otros integrantes del Grupo A, que se enfrentan este viernes.
En la próxima jornada, los rusos se jugarán la vida ante los egipcios, mientras que los de Pizzi buscarán una epopeya ante los charrúas, pero que por lo mostrado hoy no tienen mucho que decir.
