CLEBURNE, Texas, EE. UU. – Rafael Palmeiro sabe que hay personas que piensan que está demasiado viejo y se ha vuelto loco con sus planes de regresar a las Grandes Ligas a los 53 años.
Casi 13 años después de que su carrera en las mayores concluyó manchada, luego que arrojase positivo por consumo de esteroides, Palmeiro se sumó ahora a los Railroaders de Cleburne de una liga independiente, como compañero de equipo de su hijo de 28 años.
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Palmeiro optó por esa ruta luego que ningún equipo de las mayores lo invitó a los entrenamientos de primavera. Dijo el jueves que su objetivo es regresar a las Grandes Ligas y que esa es la única razón por la que volvió a jugar.
El toletero cubano registró 3.000 hits y 500 jonrones, pero fue ignorado por los votantes del Salón de la Fama y sacado prematuramente de las boletas.
Palmeiro nunca negó el análisis positivo de 2005, pero ha dicho que nunca tomó a sabiendas una sustancia prohibida y que una inyección contaminada de vitaminas provocó el resultado adverso. Dice que espera que algunas personas que piensan que hizo trampas lo vean jugar productivamente ahora.
