Si algo distinguió a ambos los Patriots de Nueva Inglaterra y los Falcons de Atlanta de camino al Super Bowl LI, es que poseen de las mejores ofensivas en la NFL y son potentes en la posición de mariscal. Tom Brady y Matt Ryan tienen una diversidad de armas que pueden ayudar a hacer el partido en uno de muchos puntos.
Atlanta lideró la NFL en puntos (540) por amplio margen, gracias a la mejor temporada de su quarterback Matt Ryan y su receptor Julio Jones. Si esa combinación se acerca a su producción de la temporada regular, los Falcons podrían ser imparables.
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Si los Patriots logran contener a Jones, el aporte de los receptores Mohamed Sanu y Taylor Gabriel será esencial para Atlanta. Los corredores Devonta Freeman y Tevin Coleman también serán claves en el juego aéreo.
Por otro lado, en busca de un sin precedentes quinto anillo de campeón para la posición, el mariscal de los Patriots Tom Brady recurrirá a todos como receptores. La figura del partido de título de la Conferencia Americana fue Chris Hogan, quien atrapó nueve pases para 180 yardas y dos touchdowns contra Pittsburgh. Podría ser la quinta o sexta opción para Brady por detrás de Julian Edelman, Danny Amendola, Malcolm Mitchell y los corredores LeGarrette Blount y Dion Lewis.
Aunque su blanco predilecto, el tight end Rob Gronkowski (87), quedó descartado por lesión, Brady ha podido mantener una buena sintonía con el suplente Martellus Bennett (88).
