Recientemente, el doctor Heriberto Marín Centeno nos presentó un análisis realizado para el “Grupo de Trabajo sobre Criminalidad y Violencia” -conformado por nuestra oficina legislativa- en el que se compara la tasa de homicidios de Puerto Rico con el resto del mundo del 2010 al 2017.
Surge del referido análisis que, durante el periodo del 2010 al 2017, Puerto Rico fue uno de los países con la tasa de homicidios más alta del mundo, aun ajustando los datos por la distribución de edad de la población, y con una tasa de homicidios más alta que todos los países localizados en quince de las subregiones geográficas.
En resumen, para el 2017, Puerto Rico ocupaba la posición mundial número 16 con la tasa de homicidios más alta por cien mil personas estandarizada por edad.
El Dr. Marín Centeno expuso que si tomamos en consideración el hecho de que hay innumerables países del mundo que han sido exitosos en lograr niveles bajos de homicidios, criminalidad y violencia, podríamos entonces aprender de sus experiencias.
Además propuso que debemos identificar cuáles son los países con las tasas de homicidios más bajas y cuáles de estos son más comparables con Puerto Rico en términos de tamaño poblacional, nivel económico y características geográficas y culturales, por mencionar algunos ejemplos. De igual forma, sugirió estudiar y analizar cuáles son las políticas, leyes y estrategias en estos países que han incidido o están asociadas a los niveles bajos de homicidios, criminalidad y de violencia de estas sociedades.
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Planteó, además, que debemos utilizar la evidencia científica más robusta disponible para determinar cuáles de estas políticas han sido exitosas en disminuir los niveles de homicidios, criminalidad y violencia y determinar cuáles podrían ser adaptadas e implementadas en Puerto Rico.
Finalmente, el Dr. Marín concluyó que, utilizando los resultados de este análisis, se puede preparar y someter legislación dirigida a implementar políticas, programas y estrategias que promuevan una sociedad con niveles más bajos de homicidios, criminalidad y violencia. Desde nuestro escaño, hacia ahí nos dirigimos.